Desde 2018, por decisión del Gobierno, los equipos que no sean declarados ya no podrán usarse.
En el Gobierno remarcan que esto afectará sólo a los teléfonos llegados al país desde que la nueva norma entre en vigencia (no los ya ingresados). Enfatizan además que la medida apunta principalmente a desbaratar el negocio de contrabandistas y ladrones de celulares.
De todas maneras, admiten que el nuevo sistema también impedirá que los viajeros activen en el país los teléfonos comprados afuera, si al regresar “olvidan” declararlos y pagar los aranceles que correspondan.
“La idea es que, al pasar por la Aduana, el turista registre el aparato que compró afuera para que su IMEI sea sacado al instante de la lista negra. Asimismo, si el celular se adquirió en una web extranjera y llegó por correo ‘puerta a puerta’, el comprador podrá desbloquearlo en el mismo trámite con el que confirma la recepción del paquete”, precisó una fuente calificada del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom).
Ahora bien, si el viajero omite declarar el equipo, no podrá tener servicio en el país. Salvo que haga un trámite especial, pagando los impuestos que haya evadido. “Está en definición cómo se implementará, pero la resolución va a incluir un mecanismo lo más sencillo posible para que la persona regularice la situación”, añadió.
Aún sin la nueva “lista negra”, quienes hoy compran celulares de manera informal -a veces sin advertirlo- se exponen a determinados riesgos. “En caso de un desperfecto o rotura -explicó Hellemeyer-, no tienen garantía y nadie les asegura repuestos. Además, si están diseñados para comunicarse en otras redes, pueden funcionar mal, con menor velocidad y gastando más batería.”
Los signos que delatan a los aparatos ilegales: cómo reconocerlos
Si se concretan las intenciones del Gobierno, desde el año que viene comprar un aparato de origen ilegal implicará gastar una biena cantidad de dinero en un objeto que nunca tendrá chances de comunicarse. Por eso, será clave que los compradores, al llegar a los negocios, sean capaces de reconocer a tiempo estos equipos, para no ser estafados.
Como primera medida, y previo a concretar la compra, los expertos consultados recomiendan verificar que el número de IMEI del aparato no figure en la “lista negra” nacional.
Para eso, es necesario primero averiguar ese código único de 15 cifras, algo que se logra marcando *#06# en el aparato. Y luego, verificar en el sitio www.enacom.gob.ar/imei si el dispositivo está o no habilitado para utilizarse en la Argentina.
Otros signos que deberían inducir la sospecha son la falta de la estampilla fiscal de la AFIP en el aparato (no en la caja) y que tenga un cargador no diseñado según las normas de seguridad eléctrica vigentes en el país: por ejemplo, si para enchufarlo es necesario utilizar un adaptador.