En una jornada marcada por el intenso calor que caracteriza al verano cordobés, un hombre de 33 años perdió la vida este lunes al arrojarse al río San Antonio, en la localidad de Cuesta Blanca, cercana a Villa Carlos Paz. La víctima, identificada como Emiliano Ustari, sufrió un golpe fatal en la cabeza tras impactar con una roca oculta bajo el agua.
Ustari, oriundo de De Bary, en el partido bonaerense de Pellegrini, residía en La Pampa, donde trabajaba en campos de la zona de Catriló. Estaba de vacaciones en Córdoba junto a su pareja, una mujer pampeana de 40 años, cuando ocurrió la tragedia.
Un golpe letal bajo el agua
Según el relato brindado por la pareja de Ustari a la Policía de la Departamental Punilla, el hombre se arrojó al río sin advertir la presencia de una piedra sumergida. El impacto le causó una herida grave en el parietal derecho del cráneo. A pesar de los esfuerzos del personal médico de emergencia, que realizó maniobras de reanimación en el lugar, no fue posible salvarle la vida.
El fatídico episodio tuvo lugar en el balneario Cuesta Blanca, uno de los tantos puntos turísticos que reciben visitantes durante el verano en el Valle de Punilla. La Policía confirmó el fallecimiento de Ustari en el lugar del accidente.
Una temporada con múltiples tragedias
La muerte de Emiliano Ustari se suma a una preocupante estadística en los cursos de agua de Córdoba. En apenas dos semanas, ya son cuatro las víctimas fatales por golpes o ahogamientos en ríos de la provincia.
El pasado 2 de enero, un turista falleció en el río El Fantasio tras sufrir una descompensación mientras se bañaba. Días antes, en Año Nuevo, un hombre de 46 años fue encontrado sin vida en el río Santa Rosa, cerca del paraje El Corcovado. Asimismo, el 27 de diciembre, otro hombre de 37 años fue hallado ahogado en La Calera tras desaparecer durante una tarde en El Diquecito.
Llamado a la precaución
Con el inicio de la temporada estival y el incremento del turismo en la región, las autoridades locales han reiterado la importancia de extremar los cuidados en ríos y balnearios. Advierten sobre los riesgos ocultos en los cauces, como piedras, corrientes y desniveles, que pueden resultar peligrosos, incluso para personas que saben nadar.
El trágico desenlace de Emiliano Ustari es un recordatorio de la necesidad de precaución en estos entornos naturales, especialmente durante jornadas de alta afluencia y temperaturas extremas.