En marzo del 2022, Ilda Griotti fue atacada por un perro pitbull dentro de su casa en la localidad de Realicó y murió un día después por la gravedad de las heridas. El lunes que viene comenzará el juicio que tiene como acusada de homicidio culposo a Marta Garrone, que la defensa va a intentar demostrar que era la dueña del perro. La abogada defensora de la familia de la víctima, Silvia Bogetti, pasó por los micrófonos de InfoPico Radio 99.9 y aseguró que los relatos de los testigos son “escalofriantes”.
La letrada explicó que el caso está caratulado como “Ministerio Público Fiscal contra Marta Garrone por homicidio culposo por ser la presunta cuidadora y responsable del perro que atacó a la víctima, el fiscal es Juan Pellegrino, que trabajó muy bien y está previsto que el juicio dure toda la semana próxima”.
La defensora de la familia detalló lo que está probado a unos días del juicio: “un perro pitbull estaba suelto en la vía pública, ya había tenido un altercado con otro perro que quedó grabado en la cámara del supermercado Sonia, un señor puedo detenerlo y evitar que matase al perro y siguió al pitbull, que entró a una casa. Mientras tanto, el hombre llama a la policía e ingresan y ven que el perro estaba ‘encarnizado’ con la señora. Con ayuda de otras personas, logran separar al perro y la ambulancia trasladó a la víctima, que en primera instancia debieron cortarle una pierna y al otro día sufrió un shock hipovolémico y falleció”.
Bogetti hizo referencia a los testimonios del hecho y uno en particular: “escuchar el relato de la primera persona que entró cuando el perro estaba atacando a Ilda es escalofriante, dantesco y es el día de hoy que no se puede reponer de esa situación. Como le pasó a ella, le podría haber pasado a cualquiera de las personas que circulaban por la vía pública, ya que hay un supermercado muy cerca y el movimiento es importante“.
El juicio comienza el lunes 23 de octubre y finaliza el viernes 27 con los alegatos, pasarán entre 13 y 35 personas. “Hay testigos que son determinantes porque saben donde vivía el perro y van a aportar datos relevantes para llegar a determinar la verdadera propietaria del animal. Estamos convencidos, que a pesar del dolor, será un alivio para la familia y para la comunidad realiquense”.
“La imputada ocultó en todo momento ser la dueña del perro: aseguró que había tenido un perro similar, pero que había muerto y que el atacante no vivía en su casa” “Estamos evaluando el pedido de pena, pero nuestra idea es solicitar un mínimo de tres años de prisión efectiva”, reveló la abogada.