El apicultor nos visitó en los estudios de INFOPICO RADIO 99.9 donde nos contó sobre sus inicios, hace 37 años, en la apicultura y la actualidad del sector, que tiene mucho auge en el exterior.
En el vibrante mundo de la apicultura, pocos nombres en La Pampa resuenan con tanta dedicación y perseverancia como el de Alejandro Zavattero. Fundador de “Santa Teresita”, una empresa emplazada en el corazón de General Pico, ha dedicado 37 años de su vida al manejo de las abejas y la producción de miel, compaginando esta pasión con su rol de bombero y padre de familia.
Comienzos Humildes
La historia de Zavattero en la apicultura comenzó con una visión clara y un deseo compartido con su amigo y socio inicial, Guillermo Saín, con quien estuvo 21 años. Su objetivo era asegurar un futuro económico estable que permitiese a sus hijos cursar estudios superiores sin la preocupación financiera que conlleva salir de la provincia. “Con un amigo decidimos emprender esta actividad de la apicultura y, con el correr de los años, se convirtió en nuestra única ocupación”, explica Alejandro.
El crecimiento de Santa Teresita
Desde su modesto inicio en la casa de Zavattero, situada al lado de la cancha del Club Ferro de General Pico, “Santa Teresita” ha crecido significativamente. Tras más de dos décadas en sociedad con Zain, Alejandro siguió camino solo y trasladó la operación al parque industrial de la ciudad, donde ahora maneja una planta de extracción moderna. Actualmente, “Santa Teresita” gestiona unas 600 colmenas, con una producción orientada tanto al mercado interno como a la exportación.
“La mayor parte de nuestra miel se destina a la exportación a mercados en Europa y Estados Unidos, aunque también vendemos a nivel local bajo nuestra marca, que es bien reconocida en la región”, señala Alejandro.
Desafíos y Evolución
A lo largo de las décadas, Zavattero ha enfrentado numerosos desafíos, desde la logística y los costos de operación hasta el desgaste físico que implica el trabajo apícola. “Normalmente terminas con secuelas físicas como hernias o, en mi caso, un reemplazo de cadera”, comenta, subrayando la dureza de la profesión.
Sin embargo, el sector ha evolucionado. La tecnología ha facilitado algunos procesos y mejorado las condiciones de trabajo. “Antes no existían máquinas para cargar las colmenas; hoy día, quien desarrolla la apicultura a gran escala ya incorpora maquinaria que reduce mucho el esfuerzo físico”, explica.
Un Futuro Sostenible
Mirando hacia el futuro, Zavattero se muestra optimista pero consciente de las dificultades. La apicultura sigue siendo una actividad exigente y costosa. Sin embargo, está comprometido con la formación de nuevos apicultores y la mejora continua del sector.
“Parte de nuestra misión es ayudar a los nuevos en la industria. La apicultura es complicada y costosa, pero con un enfoque claro y perseverancia, es posible tener éxito”, afirma.
Escuchá la nota completa en el podcast.
Alejandro Zavattero y su empresa “Santa Teresita” son un testimonio de la pasión y el compromiso con la apicultura en La Pampa. Su historia no solo es un relato de éxito empresarial, sino también de un profundo amor por su trabajo y su comunidad.