Crece la preocupación luego de los graves hechos de violencia de género ocurridos en Santa Rosa. Solo 72 horas de diferencia entre uno y otro y un denominador común: los femicidas eran miembros de las Fuerzas de Seguridad.
No se trata únicamente de hombres asesinando mujeres, sino que ambos femicidas eran miembros de las Fuerzas de Seguridad de la provincia y terminaron con la vida de sus parejas con sus respectivas armas reglamentarias. Además, los dos asesinos se suicidaron tras de cometer los femicidios.
El Comisario Mayor, Claudio Cano, aseguró que “son situaciones inesperadas que nos duelen a todos como sociedad y que nos hace una mella en la vida diaria” y remarcó “no paso ni una semana y tuvimos que afrontar otra situación, ahora con un empleado del Ejército”.
En tanto, manifestó que el Regimiento de Infantería Mecanizada, del cual Elías Funes (40) era sargento, no tenía conocimiento sobre lo que sucedía, ya que no tenía ningún tipo de antecedente que pudiera poner en alerta a las fuerzas sobre un posible ataque o desenlace como el ocurrido el pasado lunes por la madrugada.
Cabe destacar que lo mismo sucedió con el femicida Antonio Gustavo Boland (44), quien era miembro de la Policía Federal, y el pasado viernes 25 de marzo mató a su pareja de 3 disparos con su arma reglamentaria. El asesino en cuestión tampoco contaba con antecedentes sobre violencia de género que pudieran haber actuado de alerta previo al hecho.
Un dato no menor, es que Funes estaba a cargo de un lugar muy específico dentro del Regimiento, como es el acceso a armas, se trata de un aspecto que actualmente se encuentra en etapa de investigación. “Nuestra institución policial está atenta a colaborar en que esto no suceda más, tenemos reglamentación que nos ordenan disposiciones de como proceder ante una situación de violencia de género“.
“Desde la Unidad Funcional damos cuenta a la Fuerza de Seguridad que sea si existe un empleado involucrado en una cuestión de género o si existe una sospecha, para que se tomen las medidas necesarias, como puede ser la intervención con un equipo interdisciplinario”, explicó Cano.
En este sentido, Cano fue consultado sobre el replanteo y las acciones a seguir que deben tomar las Fuerzas de Seguridad ante los reiterados hechos y destacó “ya lo hacemos, desde que salió el decreto 37 del Gobernador, Sergio Ziliotto, que nos indica medidas preventivas y formas de proceder ante una sospecha o una situación denunciada por violencia de genero”.
Por lo que precisó que cuentan con equipos interdisciplinarios de la división de Servicios Sociales, quienes son los primeros interventores ante una denuncia. De esta manera, una vez que se establece que una oficial está involucrado en una cuestión de genero, “inmediatamente se le retiene el arma y se lo pone a disposición del equipo, donde será evaluado con profesionales propios y particulares la situación de servicio del mismo y cuando será su posible reintegro“.
