Hoy vamos hablar de las salvias de uso ornamental, que son aquellas que nos aportan gran cantidad de flores desde la primavera hasta el otoño. Son súper rusticas y no necesitan cuidados.
Las salvias nos ayudan atraer aves y mariposas que aportan una gran biodiversidad en el jardín. Son herbáceas que podemos encontrarlas a lo largo de todo el mundo desde las naturales hasta aquellas que son desarrolladas por mejoramiento genético. Algunas se comportan como:
- Perennes: son aquellas que pueden desaparecer en el invierno con las heladas, pero vuelven a brotar y florecer en primavera.
- Anuales: son aquellas que no resisten el frio y se deben volver a colocar en el jardín en la primavera.
Variedades que funcionan muy bien en nuestro clima, que soportan suelos secos y con aguas saladas:
Salvia leucantha: flores en racimos de color lilas, rosados o violetas con blanco, follaje gris plata aterciopelado, gran floración y de gran porte puede superar el 1.5 m de altura.
Salvia guaranitica: flores de color azul intenso, sus hojas son de mayor tamaño al resto de las salvias, color verde intenso.
Salvia argentina celeste o blanca: salvia de hoja pequeña, porte bien columnar, flores pequeñas en espigas de color blanca o celeste.
Salvia involucrata: salvia de porte mediano de 1.2 m de alto, de flores rosadas fuertes (fucsia) espiga más corta, hojas verde medio de tamaño grande.
Salvia jewel pink (salvias rosa pastel): planta de porte pequeño, con flores medianas de color rosada pastel, hojas rugosas opacas, con abundante floración.
Salvia greggii: salvia de flor pequeña pero con abundante floración, la mayoría hibridas, de tamaño compacto no mayor a 1 metro de alto, flores de todo tipo de colores, hasta combinadas. El follaje es verde o puede venir variegado con blanco. Su flor es comestible, muy dulce por la cantidad de néctar.
Salvia farinácea: anual de verano de flores azules, no resiste las heladas, tamaño no mayor 70 cm. De alto.
Jimena Asquini – Tec. Floricultura – Mat. 788