La Municipalidad de General Pico envió al Concejo Deliberante un proyecto para modificar el método de cálculo de la tasa de alumbrado público.
La iniciativa propone eliminar el componente variable, equivalente al 3,5% del consumo de energía eléctrica por cada medidor, y dejar vigentes solo dos cargos fijos: uno asociado a la cantidad de luminarias por cuadra y otro al alumbrado de espacios públicos comunes. Según fuentes consultadas, el cambio impactará de manera diferente según el tipo de usuario y según su nivel de consumo actual.
De dónde surge la modificación
Desde 1999, el servicio de alumbrado público en General Pico está concesionado. El cargo que se abona se calcula con tres componentes:
Un cargo fijo que depende de la cantidad de luminarias por cuadra.
Otro cargo fijo por el alumbrado de espacios públicos comunes (plazas, parques, avenidas, etc.).
Un cargo variable correspondiente al 3,5% del consumo de energía eléctrica que registra el medidor de cada usuario.
El Ejecutivo local plantea que, al contar con más del 90% del alumbrado con tecnología LED, el gasto energético hoy es menor y, por ende, el porcentaje del consumo interno (3,5%) dejó de tener sentido como referencia. Para “transparentar” la tasa y ajustarla al costo real de prestación, el proyecto propone eliminar este tercer ítem, algo que no se modificaba desde hace más de dos décadas.

Qué sucede con la factura
El impacto, según lo conversado con fuentes municipales, rondaría los 960 pesos más por mes para un usuario “promedio” cuyo consumo de energía eléctrica ronda los 60.000 pesos en su factura total. Dicho de otro modo, si hoy pagan, como en la imagen ejemplo, $3.700 por alumbrado público, podrían pasar a pagar alrededor de $4.650. Esto se debe a que aumenta el cargo fijo por luminarias de $1.812 a 2.880 y el cargo fijo por espacios comunes de $1.115 a $1.770, y se le elimina el cargo variable de $754 (este cargo variable hoy impacta mucho más, obviamente en los usuarios de mayor consumo), lo que en total da los $969 del ejemplo citado, lo que coincide con los números brindados por la municipalidad.
Justificación
Desde el municipio señalan que la ciudad no es la misma que en 1999: la modernización de la infraestructura (con luminarias LED de menor consumo) llevó a un replanteo en el modo de costear el servicio. El nuevo esquema, argumentan, es más ajustado a la realidad, porque “antes, quien más consumía de manera privada aportaba más al alumbrado público, aunque no necesariamente incurriera en un costo mayor por ese servicio”.
Un paso más en las “estructuras de costos”
Esta decisión no está aislada de otros cambios realizados en General Pico desde 2019, cuando la gestión municipal empezó a implementar esquemas tarifarios atados a los costos reales de cada servicio. El Concejo Deliberante había respaldado anteriormente estas medidas para dotar de mayor transparencia a los valores y evitar déficits en la prestación de servicios públicos.
En el caso del alumbrado, se explica que la ciudad ahora presenta más de un 90% de luminarias LED, que consumen menos y requieren menor mantenimiento. “Antes, el 3,5% del consumo eléctrico interno como parámetro servía porque las inversiones a realizar eran más altas, había que expandir la red y el sistema de alumbrado en muchos barrios de la ciudad. Hoy la realidad cambió”, señalan en el municipio.