El panorama económico del país sigue mostrando signos de deterioro. Según datos proporcionados este viernes 15 de septiembre por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), la canasta básica se elevó un alarmante 14,3% en agosto. Como consecuencia, una familia estándar, compuesta por dos adultos y dos menores, necesita aproximadamente $284.687 para mantenerse por encima del umbral de pobreza.
Sin embargo, la situación es aún más grave si nos centramos en la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que escaló un 17% en el mismo mes. Este índice determina el nivel mínimo de ingresos que una familia requiere para evitar la indigencia. En términos concretos, un grupo familiar de cuatro miembros (dos adultos y dos niños) debió contar con ingresos de $130.590 para no caer en la indigencia.
Desglosando aún más estos datos, para un núcleo familiar de tres miembros, los valores se situaron en $226.644, y si se trata de cinco integrantes, la cifra aumenta a $299.428. Estos valores han experimentado un aumento del 137% en comparación con el año anterior.
Individualmente, un adulto precisó de $92.132 en agosto para no ser categorizado como pobre y, si nos enfocamos exclusivamente en alimentos, el mismo adulto necesitó al menos $42.262 para evitar caer en la indigencia.
El dato más alarmante viene en forma de inflación. INDEC reportó una inflación de agosto del 12,5%, y una tasa interanual del 124%. Sumando todos los datos desde principios de año, el 2023 ya ha experimentado un aumento en los precios del 80,2% en los primeros ocho meses. De todas las categorías, Alimentos y Bebidas fue la que más experimentó esta inflación, con un aumento promedio del 15,6%.
Este panorama refleja una realidad preocupante para la mayoría de las familias en el país, que ven cómo sus ingresos se vuelven insuficientes para cubrir las necesidades básicas mes tras mes. La esperanza es que se tomen medidas prontas y efectivas para revertir esta tendencia y brindar alivio a millones de personas.
