El Diputado Radical, Marcos Cuelle, completó el informe originario sobre el presupuesto ejecutado por el IPAV y en la segunda parte asegura que hubo años en los que el presupuesto no ejecutado ascendió al 83%.
En el informe anterior el diputado radical había resumido que el 50 %, en promedio, de los fondos con los que contó el IPAV, no fueron utilizados.
Con el título “¿POR QUÉ FALTAN VIVIENDAS EN LA PAMPA? –Segunda Parte–“, el legislador señala que “como introducción, rápidamente se debe recordar que, para cubrir las ineficiencias propias, el gobierno provincial cargaba las tintas contra el gobierno nacional, gritando desgarradamente la falta de fondos para viviendas. Sin embargo, la propia información que genera el propio Estado, permitió objetivamente observar que los fondos de origen nacional fueron fluyendo hacia la provincia de La Pampa durante el período anterior, y así fue reconocido públicamente por la autoridades provinciales”.
“Cuando ello salió a la luz, discursivamente se argumentó que los fondos para programas federales efectivamente se pagaron ‘sin voluntad política, tarde y mal’; lo que implícitamente al tiempo que ratifica que ello ocurrió (el pago), hacía caer todas las argumentaciones anteriores. Por otra parte, también ha quedado plasmada en la información oficial (Cuenta de Inversión) que el Instituto Provincial Autárquico de la Vivienda no utiliza la totalidad de los recursos asignados por ley de presupuesto; prueba de ello es que durante un lapso de quince años (2006-2020), solo utilizó en ‘promedio’, poco más del 50% de los recursos asignados para sueldos, bienes y servicios, y los trabajos públicos”, agregó.
“Por lo tanto, es necesario abordar dónde radica la mayor deficiencia a la hora de utilizar los fondos asignados por ley, y para ello es gravitante analizar los trabajos públicos que debía llevar adelante el IPAV, dado que es donde se encuentran previstas aquellas obras vinculadas a programas de viviendas y/o soluciones habitacionales. Si los gobiernos nacionales comprendidos entre el 2006 y 2015 pagaron con voluntad política, tempranamente y bien (a contrario de lo que dicen habría ocurrido en el período anterior), debería implicar altas inversiones por parte del IPAV en los trabajos públicos, es decir, una utilización elevada de los fondos para obras vinculadas a programas de viviendas y/o soluciones habitacionales”, destaca.
“Sin embargo, nuevamente es alarmante la información extraída de fuentes oficiales, máximo cuando el déficit habitacional según el propio Gobernador es de 20.000 viviendas. A excepción del año 2013, donde la utilización de fondos para trabajos públicos alcanzó casi el 90%, quedando un remanente sin utilizar del 10%; la mayoría de los años del período bajo análisis los porcentajes que reflejan la no utilización de los fondos asignados a obras para viviendas ha sido lastimoso, siendo el año 2015 el máximo exponente, donde el 83% de los fondos asignados a trabajos públicos para garantizar el acceso a la vivienda, lamentablemente no se utilizaron. En estas instancias, existen dos preguntas que se hacen las y los pampeanos. La primera está relacionada con la magnitud física de lo que no se ha utilizado, ¿cuánto representa en dinero esa suma de fondos que no se utilizaron para programas de viviendas?, y para ello, es necesario utilizar una unidad de medida que haga homogéneos los valores en virtud del paso del tiempo”, informó.
“Si se toma la cotización de dólar oficial al final de cada año, el importe que no se ha utilizado para la realización de trabajos públicos vinculados a los programas de viviendas durante el período 2006 a 2015 ascendería aproximadamente a 450.000.000 de dólares”, calculó.
“La segunda pregunta que las y los pampeanos se hacen es ¿cuántas viviendas sociales representan esos dólares no utilizados? Según el propio IPAV, Nación financia hasta 63.040 UVIs por vivienda (La Unidad de Vivienda -UVI- es un indicador que surge de la Ley 27271), cada UVI representa un metro cuadrado de construcción. Actualmente el valor de la UVI está aproximadamente en 101 pesos, lo que representaría que el valor de cada vivienda circa los 6.350.000 pesos. El resto es convertir el valor de la vivienda en dólares según la cotización oficial, para concluir finalmente que, si el IPAV hubiera utilizados los fondos asignados a los trabajos públicos para programas de viviendas, podría haber reducido la demanda de unidades habitacionales en la provincia de La Pampa, en un plazo de diez años, en aproximadamente 7.500 nuevas viviendas”, aseveró.
“Durante el período 2006 a 2015, Nación y Provincia estuvieron en cabeza del mismo partido político, por ende, deberían dar explicaciones de las decisiones políticas por las que privaron al pueblo de La Pampa de los trabajos que hubieran generado obras que hubieran mitigado el déficit creciente en la demanda de viviendas”, remarcó.
“La conclusión es obvia, con cupos o sin ellos, recibir fondos para finalmente no construir viviendas tampoco es una solución para las y los pampeanos”, finalizó Marcos Cuelle.