Por Norberto G. Asquini

La era de la apatía: qué quiere ganar cada candidato en La Pampa

La era de la apatía: qué quiere ganar cada candidato en La Pampa
26 Agosto, 2021 a las 16:30 hs.
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Norberto Asquini

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El escenario preelectoral, a menos de veinte días para las PASO, está marcado por la apatía. No hay interés en las elecciones legislativas y la gente tiene la cabeza en los problemas cotidianos, ya sea económicos o por la pandemia. Las distintas fuerzas políticas sin embargo afrontan cada una un desafío distinto: ¿qué busca el Frente de Todos o Juntos por el Cambio en las urnas? ¿Qué quiere ganar cada uno? ¿Qué campaña están haciendo?

Las campañas han muerto

Los consultores y encuestadores están marcando a nivel país un escenario de desafección y la posible baja participación en las urnas. El consultor Gustavo Córdoba indica en una columna de Letra P que “empiezan a asomar síntomas preocupantes” ya que por primera vez en un proceso electoral pareciera que la campaña transcurre por carriles separados a los de la vida cotidiana de las personas. No hay parafernalia electoral en las ciudades y la política está ausente de las conversaciones. Solo los escándalos asoman en la agenda pública.

Hay además indicadores concretos de la creciente apatía, como sucedió en las elecciones de Salta y de Misiones que sorprendieron los porcentajes de baja participación, indica Córdoba. En la primera apenas votó el 60%.

En las últimas encuestas nacionales de Gustavo Córdoba, además, “sorprende la enorme separación o desacople que hay entre las preocupaciones e intereses de los argentinos y los temas que aparecen constantemente en la discusión política”. Y la falta de narrativas que logren enamorar o movilizar a la gente, a diferencia de lo que ocurrió con Cambiemos en 2015 o con el Frente de Todos en 2019. Mario Riorda ya dijo que “las campañas electorales han muerto” frente este estancamiento en los modos de hacer campaña.

Por su parte, Maxi Aguiar afirma que esta será “una elección muy pero muy fría. Sólo 3 de cada 10 argentinos está muy interesado en las próximas elecciones. Este es el valor más bajo de las últimas 5 elecciones”. La medición realizada mostró que el 22,3% está nada interesado y el 43,5% solo “algo interesado” en las próximas votaciones.

Qué busca ganar cada fuerza

En La Pampa está ocurriendo algo similar. Campañas lavadas desde lo narrativo, sin movilización en las calles y una calara apatía por parte de la gente. El proselitismo se hace en las redes sociales, con mayor o menor acierto. Las campañas están basadas en las personas más que en las ideas. La pandemia cambió la forma de hacer política en 2021, o profundizó algunas tendencias.

Como en otros puntos del país, reina un tono moderado y de cautela en cada fuerza frente a un escenario social marcado por el desinterés del electorado. No hay estridencias en una campaña frente al malestar por la situación económica y la inestabilidad ante la situación sanitaria.

El Frente de Todos recorre con sus candidatos y candidatas la provincia. El objetivo es obtener con su única lista de unidad más votos que la suma de la interna de Juntos por el Cambio. Y que el resultado sea un espaldarazo para el gobernador Sergio Ziliotto, cuya figura es central en esta campaña, figurando en la gráfica. Los pronósticos son buenos. El anuncio de la llegada este viernes del presidente Alberto Fernández muestra que La Pampa es territorio amigo. Como indica Gabriela Pepe en Letra P, el mandatario decidió pisar terreno seguro como son también San Juan y Catamarca, donde “el peronismo ya tiene prácticamente ganadas” esas elecciones.

La madre de las batallas estará en Juntos por el Cambio con cinco listas. La disputa central es la que enfrenta a Altolaguirre-Pérez y a Kroneberger-Maquieyra. Las campañas no tuvieron altisonancias y cada sector está más sumido en disputar la interna que en ser oposición al peronismo. El tono también ha sido moderado y apenas propositivo. La competencia es hacia adentro de la fuerza y al PJ no se lo toca. En estas PASO, la lista que pierda quedará afuera literalmente y la que gane mirará 2023 con otros ojos.

Las demás listas no juegan tanto sus chances en esta elección sino que medirán fuerzas para intentar hacer pie y ver qué espacios pueden ocupan dentro de dos años. Tienen enfrente a dos estructuras poderosas.

El resto de las boletas tratará de pelearle a la polarización que se lo lleva todo. El PS como alternativa a la grieta. Las listas del FIT-Unidad y el MAS desde posiciones más testimoniales y hablándole al votante de izquierda, muy minoritario en la provincia.

Se viene una elección que no está en la cabeza de la gente. Un escenario raro para la política provincial.

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