El juez de audiencia de juicio de General Pico, Marcelo Pagano, condenó a Ricardo Emanuel Cazenave, de 28 años, por considerarlo autor material y penalmente responsable de los delitos de “abuso de arma y portación de arma de fuego de uso civil sin la debida autorización legal agravada por tener antecedentes penales “; a la pena de cuatro años de prisión.
La condena le fue unificada con una pena anterior, dictada el 27 de junio de 2017, por dos hechos diferentes, uno referido a la “portación ilegal de arma de guerra, atenuada por las circunstancias del hecho y las condiciones personales del autor, resultando evidente la falta de intención de utilizar el arma portada con fines ilícitos” y el otro por el mismo delito con un arma de fuego de uso civil.
En este fallo, la condena fue fijada en tres años de ejecución condicional e inhabilitación especial por seis años para la tenencia, transporte, portación, adquisición y/o acopio de armas de fuego, piezas y/o municiones de éstas.
De éste modo, el magistrado le revocó la condicionalidad de la pena anterior; componiendo la pena única de cuatro años de prisión y le mantuvo la inhabilitación especial impuesta por el fallo anterior.
Hechos
Con las pruebas aportadas en la causa, el juez dio por probado que la mañana del 8 de noviembre de 2020, Ricardo Emanuel Cazenave arribó caminando a un domicilio de esta ciudad, en cuya vereda se encontraba el damnificado junto a tres amigos.
Una vez en el lugar, el imputado comenzó a dialogar y buscar verbalmente pelea con uno de los presentes, por lo que fue echado del lugar. Posteriormente regresó junto a otro ciudadano quien conducía su motocicleta y sin mediar palabras Cazenave se arrojó de la motocicleta, extrajo de su cintura una pistola calibre 22 y comenzó a efectuar disparos hacia el grupo de jóvenes entre los que se encontraba la víctima, a quien finalmente le asestó 1 de los 6 tiros que efectuó e inmediatamente se dio a la fuga.
El disparo le provocó al damnificado una herida por proyectil de arma de fuego con orificio de entrada y salida en la pierna derecha.
El acuerdo fue firmado por el fiscal Guillermo Komarofky, la defensora particular María Laura Vaquero y el imputado. El damnificado, al ser informado sobre el acuerdo arribado por las partes, prestó su conformidad.
Finalmente, el magistrado agregó que “la judicatura se encuentra limitada por el pedido de pena solicitado en el acuerdo, tanto por antecedentes jurisprudenciales”.
Como circunstancias atenuantes tuvo en cuenta la escasa instrucción y la juventud del acusado. Como circunstancias agravantes, consideró “ la reiteración de hechos mediante la utilización de armas de fuego por lo que registra una condena anterior, y el peligro creado al disparar el arma con dirección a un grupo de personas entre las que se encontraban niños”.
