- La víctima tenía 51 años y era madre de tres hijos. Fue herida en el cuello.
- El cuerpo fue localizado detrás de una escuela.
Una maestra particular de 51 años fue asesinada de un corte en el cuello en barrio Santa Bárbara, colindante a Ciudad Evita, en la periferia sur de Córdoba capital. El hecho conmocionó a toda esa barriada, ya que Ana Carrillo, era muy conocida y querida por los vecinos.
Daba clases particulares y por la situación, junto a su marido, también hacía changas para poder sobrevivir.
Su cadáver fue hallado detrás de una escuela, según informaron fuentes policiales a La Voz.
Ana Carrillo, era madre de tres hijos, y su cuerpo fue localizado por vecinos en un descampado situado detrás de la Escuela Granadero Márquez, en Camino Santa Bárbara a la altura del kilómetro tres y medio.
Los vecinos que la auxiliaron dijeron a La Voz que la mujer tenía clavado en su cuello “una parte del cuchillo”. También señalaron, que ante la emergencia, intentaron trasladarla en la caja de una camioneta.
Investigadores creen que la mujer puede haber reconocido al asesino y que por eso fue atacada.
El crimen
De acuerdo a los datos preliminares, la maestra particular, hacía el recorrido habitual para ir hasta Ciudad Evita. Sin embargo, esta mañana fue abordada -se cree- por un asaltante, quien le robó el teléfono celular Motorola y una mochila.
Durante el asalto, le realizaron un corte en el cuello. Un hombre la trasladó al dispensario de barrio Ciudad Evita, donde se le diagnosticó una herida en el sector izquierdo del cuello y se confirmó su fallecimiento.
“La han asaltado, le quitaron la mochila y el celular. La han degollado”, dijo el marido Enrique Vázquez (29) a radio Mitre. “Ella no trabajaba en ninguna escuela, era una maestra particular que se ganaba la vida yendo casa por casa”.
“En la mochila tenía cosas de la escuela. No había dinero, sólo la llave de la casa, no había nada”, agregó.
“Ella pasaba por ese callejón para ir a la escuela, todos los días pasaba por ahí para acortar camino”, mencionó y añadió que, por falta de dinero, “también salíamos a juntar cartones”.
“Quiero justicia”, dijo el hombre.
La escena
Los efectivos del Departamento Homicidios observaron que en la escena del crimen había rastros de sangre. También secuestraron un par de sandalias y un cuchillo tipo tramontina, que sería el arma con la que se cometió el asesinato.
La fiscal Eugenia Pérez Moreno investiga el hecho.
Fuente: La Voz.
