5 años de prisión: Les apuntó con un arma a una mujer y dos niños

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16 Octubre, 2018 a las 18:00 hs.

Ingresó por la fuerza a una vivienda en cuyo interior se hallaba una mujer con dos niños. El imputado, “empuñando un arma de fuego, se las exhibió y por momentos le apuntó” a los tres.



El juez de audiencia de Santa Rosa, Daniel Sáez Zamora, condenó hoy a Samuel Cure a cinco años de prisión, por ser autor del delito de robo con arma cuya aptitud para el disparo no ha podido ser acreditada, y le mantuvo la prisión preventiva hasta que el fallo quede firme.

Luego del juicio oral, el magistrado dio por probado que el pasado 16 de abril, al mediodía, Cure –un empleado público de 19 años– ingresó por la fuerza a una vivienda de la calle Garay Vivas, en Santa Rosa, en cuyo interior se hallaba una mujer con dos niños.

El imputado, “empuñando un arma de fuego, se las exhibió y por momentos le apuntó” a los tres. En esas circunstancias, “exigió dinero y para ello los obligó a subir al dormitorio de los dueños de casa, en la planta alta. En esa habitación, luego que los niños y la mujer la revisaran por exigencia de Cure, encontraron 8.000 pesos”. El acusado tomó la plata y luego de “revisar algunas partes de la casa, se retiró. El dinero y el arma nunca fueron hallados”, detalló el juez en la sentencia.

Durante los alegatos, la fiscala Leticia Andrea Pordomingo había pedido la misma calificación y pena que impuso Sáez Zamora; mientras que el defensor particular, Carlos Pérez Funes, cuestionó que el Ministerio Público Fiscal no haya querido arribar a un acuerdo abreviado pese a hacerlo en causas similares y pidió una pena menor (tres años de cumplimiento efectivo).

El magistrado se mostró de acuerdo con la calificación legal por entender que “el hecho que el dinero no haya sido hallado es prueba más que evidente que, además ser removido de la esfera de disponibilidad de sus propietarios, Cure actuó como dueño de dicho dinero y dispuso de éste como si él lo fuera”.

“Por otra parte, el tipo objetivo del delito genérico de robo –en el que se incluye la intimidación como forma de violencia en las personas– incorpora el uso de un arma de fuego como un elemento de mayor poder intimidante en contra de las víctimas. Es por ello que en esta especificidad del delito de robo, el contenido del injusto es mayor y por ende es considerada una figura de entidad superior”, agregó.

Refirió al “temor y el impacto anímico” sufrido por las víctimas y añadió que “sin perjuicio de entender que el ingreso a una vivienda –que es el ámbito de seguridad de una familia– en forma intempestiva y empuñando un arma de fuego, ya de por si tiene un alto y grave contenido de violencia”.

Más adelante, Sáez Zamora  indicó que la figura del robo “exige un dolo directo y específico, en cuanto a que el acusado se apoderó de bienes muebles (dinero) que eran propiedad de a otro”, expresando que “conocía esa circunstancia y para ello, deliberadamente, utilizó la violencia potenciada con un arma de fuego”.

Para fijar la pena, el juez consideró como factores atenuantes que Cure posee un trabajo estable en el Estado y su juventud, “lo que me permite abrigar la esperanza que una sanción penal le mejer la internalización de sus acciones futuras y logre de ese modo ser una persona útil para la sociedad”.

En cambio valoró como circunstancias agravantes “el modo en que se desarrollaron los hechos, con un ingreso intempestivo a una vivienda, al mediodía y con niños adentro de ese hogar”, provocando un fuerte impacto en ellos que aún perdura.

“Por otro lado observé, por parte del acusado, la falta de interés por su obrar ilícito y las consecuencias que generaron a las víctimas. Solo se preocupó por lo que vive hoy en día en su detención preventiva y la perspectiva de tener que cumplir una pena grave. Ello me demuestra su falta de arrepentimiento de los hechos y su desprecio por las consecuencias de sus acciones en otras personas”, concluyó el juez.