En la localidad de Jacinto Aráuz tuvo lugar el acto central conmemorativo a los 36 años del hundimiento del Crucero ARA General Belgrano, ocurrido durante el conflicto bélico por Malvinas.
Trescientos veintitrés soldados argentinos perdieron la vida en esa ocasión, entre ellos cuatro pampeanos. Una de estas víctimas, Jorge Pardou, era de la localidad anfitriona.
El secretario de Derechos Humanos de la provincia, Antonio Curciarello, acercó el saludo del gobernador Carlos Verna, destacando que el mandatario “no se pudo hacer presente hoy acá, pero está más que claro su sentir malvinense, su compromiso con la causa Malvinas y su respeto y admiración por los héroes de Malvinas, y en particular por los 4 caídos en el Crucero General Belgrano; a tal punto que a partir de 2016 se empezó a desarrollar este acto, de forma oficial en Telén, donde el gobernador nos pudo acompañar”.
Del emotivo acto participaron el ministro de Gobierno y Justicia, Daniel Bensusán, la vicepresidenta primera de la Legislatura Provincial, Alicia Mayoral, el intendente local, Oscar Beilman, el diputado provincial Darío Hernández, y los directores, de Administración Escolar y de Asuntos Municipales, Pablo Maccione y Martín Rojas, respectivamente.
“Ese ataque británico implicó la pérdida de 323 compatriotas, entre ellos 4 pampeanos que eran parte de la tripulación de 1091 personas. Jorge Delfino Pardou, de esta localidad de Jacinto Arauz, Alberto Edgardo Amesgaray, de General Pico, Daniel Enrique Lagos, de Telén, y Hugo Ramón Gatica, de Limay Mahuida”, recordó el secretario de Derechos Humanos.
Curciarello remembró la historia de la embarcación, resaltando que “el ARA General Belgrano era un buque de origen estadounidense, construido en 1938 en Nueva York. Fue comprado por la Argentina en 1951, por el entonces presidente Perón. Su primer nombre fue ARA 17 de Octubre y con el golpe de estado al General Perón, fue rebautizado con el nombre ARA General Belgrano. Su primer nombre fue Phoenix y había salido indemne de varios conflictos armados de su país de origen. Corresponde describir a esta nave, pues tiene el afecto y cariño de todos los que la han tripulado”.
Destacando la presencia de ex combatientes, algunos de ellos tripulantes del Crucero General Belgrano, el funcionario pampeano sostuvo, “son ustedes los únicos héroes de Malvinas. Quiero decirles, en nombre del Gobierno de La Pampa, que un Gobierno que los acompaña y que toma esta fecha -2 de mayo- no como una más del calendario, sino que junto al 2 de abril son fechas de profundo sentir malvinero y argentino. Esto nos hace destacar día a día la heroica, valiente y patriótica tarea que llevaron a cabo ustedes que fue la de servir a la patria, luchando por su soberanía nacional”.
Durante su discurso, Antonio Curciarello recordó el intento del Gobierno Nacional de hacer feriado móvil el 2 de abril, “en aquella oportunidad, con varios de los combatientes aquí presentes y junto al ministro de Gobierno y Justicia, anunciábamos la decisión del gobernador Verna de poner, dentro de sus facultades, un límite a tal decisión, y determinar como día no laborable el 2 de abril, en La Pampa. A partir de allí, otras provincias tomaron este ejemplo y finalmente el presidente de la Nación retornó sobre su decisión. El 2 de Abril es una fecha de reflexión y recuerdo de una herida que aún hoy sigue abierta y sangrando”.
“Nos preocupa y molesta, aunque se intente minimizar el “error”, las varias publicaciones que distintas áreas del Gobierno central han realizado del mapa argentino, sin el territorio de las islas. Nuestra soberanía es, de hecho, de derecho, y también simbólica, y eso no puede pasar por alto”, prosiguió el secretario, quien finalmente repudió “en 1997 quien hoy es el presidente democráticamente elegido por los argentinos, Macri, dijo en enero de ese año, ante el diario Página 12, ´La verdad es que los temas de las soberanías con un país tan grande como el que tenemos nunca los entiendo mucho. Nosotros no tenemos un problema como los israelíes que tienen problema de espacio. Acá lo nuestro es casi un amor propio, es más, creo que las Islas Malvinas serían un fuerte déficit adicional para la Argentina. Tengo entendido que al Tesoro de Inglaterra le cuesta bastante plata por año´. Cada uno sabrá la forma de repudiar estas aberrantes declaraciones”.
“Nadie cuestionó la dimensión del adversario”
Silvio Baridón, quién también fuera tripulante del Crucero, manifestó “todos los argentinos debemos reflexionar cuánto hacemos por nuestro país y en especial cuánto hacemos para que no queden en el olvido aquellos héroes que dieron a vida por nuestra querida Argentina”.
“Es cierto que la mayoría éramos muy jóvenes cuando en el año 1982 se declaró la guerra para recuperar las Islas Malvinas, pero les puedo asegurar que nadie cuestionó la dimensión del adversario, porque cuando se jura defender la Bandera Argentina no se hace con ningún condicionamiento, cuando se promete no se hace diferencias entre magnitudes o poder ofensivo de los ejércitos que se deberán enfrentar”, continuó.
Baridón dedicó un párrafo especial para recordar al comandante del ARA General Belgrano, Elías Bonzo, “fue como un padre, nos enseñó a ser solidarios y a estar siempre unidos”.
“No se deben cerrar las puertas del pasado, debemos ubicar cada momento histórico”
Aylén, alumna del Colegio José Ingenieros, también se dirigió a los presentes, oportunidad en la que reflexionó: “resulta muy difícil para nosotros, jóvenes de hoy, entender lo que tuvo que vivir nuestro país, lo que tuvieron que vivir aquellos jóvenes que, aún sin entender la magnitud de los acontecimientos, debieron cumplir con lo establecido y luchar por la soberanía de nuestro territorio de una manera injusta, anacrónica y determinante”.
La joven destacó los sentimientos encontrados que genera una fecha como el 2 de mayo, “el orgullo patrio por un lado y la profunda tristeza de saber que estábamos ante una guerra oscura y sin destino”. Estos sentimientos se encontraban enmarcados en una coyuntura más oscura aún, en el seno de un gobierno militar que de manera despiadada intentaba perpetuarse en un poder que había conseguido de manera ilegítima y que venía gobernando desde hacía seis años; todavía hoy vivimos sus consecuencias”.
“Recordemos que no se deben cerrar las puertas del pasado, debemos ubicar cada momento histórico y a sus protagonistas en el lugar que merecen y les corresponde. El repudio a los que enviaron a la muerte a nuestros jóvenes; el homenaje y el recuerdo a aquellos que dejaron todo por una causa”, finalizó la alumna.