El delincuente fue atrapado junto a un cómplice mientras recibía atención médica.
En la noche del sábado, cerca de las 21 horas, delincuentes ingresaron en una vivienda de calle 18 al 800 (N), aproximadamente. Según le informaron a la Policía, allí los ladrones violentaron dos aberturas para ingresar y sustraer elementos.
Cuando los uniformados concurrieron al inmueble afectado, encontraron que en una de las aberturas había mucha sangre derramada, presumiblemente de uno de los ladrones que, por la altura de las marcas, se habría cortado una pierna al pasar.
Una hora más tarde, aproximadamente a las 22, al hospital “Gobernador Centeno” ingresaron dos personas, una de ellas con una importante herida cortante en una pierna. Por esta razón los profesionales le aplicaron las curaciones del caso, a la vez que comunicaron la situación a la Policía tal como indican los protocolos de actuación.
Agentes se presentaron en la Guardia del nosocomio local y demoraron a los dos sospechosos ya, que además de la herida que presentaba uno de ellos, contaban con otros elementos probatorios para presumir que fueron los autores del robo.