El joven golpeó varias veces de forma salvaje a su pareja, por lo que irá dos años a la cárcel.
La jueza de control Alicia Loscertales condenó a un hombre de 27 años, oriundo de General Pico, al considerar que cometió los delitos de “lesiones leves agravadas por haber sido cometidas contra la persona con la que mantiene o ha mantenido una relación de pareja”, dos hechos; “amenazas simples”, dos hechos; y “privación ilegítima de la libertad agravada por ser cometida contra la persona a las que se debe respeto particular”, dos hechos.
La magistrada le impuso al violento una pena de 2 años de prisión de efectivo cumplimiento y dispuso que se libre un oficio a la Subsecretaría de Niñez, Adolescencia y Familia “con el objeto de determinar la necesidad de tratamiento psicológico y/o cualquier tipo de asistencia, orientación y contención que consideren necesario” a la víctima, ex pareja del imputado.
La resolución fue dictada a consecuencia de un acuerdo de juicio abreviado presentado por la fiscal Ana Laura Ruffini, el defensor particular Oscar Ortiz Zamora y el imputado. La propia damnificada, al serle explicadas por la jueza las implicancias del acuerdo, mostró su conformidad.
Cabe destacar, que según consta en el fallo, un informe victimológico de la Oficina de Atención a la Víctima y los Testigos, incorporado al expediente, concluyó que existía “un alto riesgo” de la reiteración del delito.
Los hechos
Con las pruebas incorporadas al legajo quedó probado que “el día 1 de diciembre de 2016, momentos en que la víctima se encontraba con su pareja, en el domicilio en el cual convivían -previo haber discutido-, el imputado la golpeó varias veces y la empujó provocando que la misma cayera sobre las escaleras de la vivienda. Seguidamente la tomó de la cabeza e hizo que impactara contra uno de los escalones, provocándole un golpe en el ojo derecho, impidiendo asimismo que la misma se acercara al Hospital a fin de ser examinada”.
Luego “el día 9 de diciembre de 2016 el imputado, previo discutir con su pareja, la amenazó de muerte manifestándole que ‘la iba a matar’, que ‘la iba a tirar por el balcón’, provocando mucho temor debido a los sucesos ocurridos días atrás”.
Por último, también quedó acreditado que el 26 de julio de 2015, “el imputado comenzó a discutir con su pareja, con quien tenía una relación de concubinato, la insultó y cerró con llave la puerta de la casa, para evitar que la misma se fuera, amenazándola. Luego la golpeó con una sandalia, pero que al intentar la víctima cubrirse la golpeó con una bota en la espalda, ante lo cual la damnificada respondió pegándole al imputado con un hierro. La damnificada a los gritos le pidió al acusado que no la agrediera más, ante lo cual éste le pegó una piña en la boca, pegándole nuevamente la víctima con un golpe de fierro en la cabeza, ante lo cual el hombre respondió mordiéndola a la altura de la sien derecha. Finalmente salieron peleando hacia el comedor, pudiendo en ese momento la damnificada escaparse de su domicilio, siendo alcanzada por el imputado en la intersección de las calles 114 y 17, quién la amenazó nuevamente”.