El designado juez federal de General Pico irá a debate por los escándalos protagonizados cuando fue subrogante en Santa Rosa.
El funcionario judicial fue procesado luego de su escandaloso paso como juez subrogante en Santa Rosa, donde fue denunciado por los propios empleados del Juzgado Federal. Lo acusan de maltratos, amenazas y malversación de fondos.
El titular del Juzgado Federal de General Pico, José Antonio Charlín, irá a juicio oral y público en la causa que se le sigue por su escandaloso paso como juez federal subrogante en Santa Rosa. Ayer, el subrogante Ignacio Rodríguez Berdier elevó a juicio oral y público la causa donde los propios empleados lo denunciaron por abuso de autoridad, malversación de fondos públicos, amenazas y acoso sexual, y ahora el Tribunal Oral Federal deberá ponerle fecha al debate.
Charlín, quien está a cargo del Juzgado piquense aunque este aún no fue puesto en marcha, está acusado de una serie de delitos por los empleados del Juzgado de Santa Rosa, perpetrados durante los meses que subrogó ese cargo en el año 2013. El mismo Rodríguez Berdier lo procesó en una dura resolución donde se describieron las irregularidades cometidas por Charlín, que incluyen -entre otras- el abuso sexual simple y la malversación de caudales públicos, además del abuso de autoridad y otros delitos.
La resolución dispuso un embargo por 80.000 pesos. Además, el Consejo de la Magistratura tiene que intervenir para determinar qué hace con su designación en General Pico, aprobada por el Senado (con el voto de todos los legisladores que representan a La Pampa, tanto oficialistas como opositores), y por eso el funcionario ya declaró en Buenos Aires.
Aquel procesamiento, sin prisión preventiva, estableció que cometió los siguientes delitos mientras fue juez federal subrogante de Santa Rosa: abuso de autoridad, en concurso ideal con malversación de caudales públicos; en concurso real con abuso sexual simple en situación de violencia de género; en concurso real con daño en dos oportunidades que concurren entre sí; en concurso real con amenazas coactivas agravadas por tener como propósito el de compeler a una persona a hacer abandono del trabajo en nueve oportunidades; en concurso material con amenazas coactivas agravadas por el mismo propósito que el caso anterior; en concurso real con amenazas simples en situación de violencia de género; en concurso real con amenazas reiteradas; en concurso real con amenazas con armas en dos oportunidades (una trincheta y una pistola); en concurso real con amenazas coactivas en situación de violencia de género; en concurso real con amenazas coactivas.
Después, una de esas acusaciones se terminó cayendo: la de que supuestamente había amenazado con un arma de fuego a una empleada. En la denuncia se indicaba que le había sacado el arma a un custodio y que había dicho que iba a matar a una empleada.
Pero como el custodio y un empleado que fue testigo del hecho dieron versiones encontradas sobre lo ocurrido, fue desprocesado sobre ese hecho puntual.
Una de las denunciantes es la actual jueza federal de Santa Rosa (también subrogante, ya que el cargo está vacante), Iara Silvestre.
Por eso es que ella no interviene en el expediente y la reemplaza Rodríguez Berdier, quien es secretario del TOF. La salida de Charlín del cargo que ocupaba en la capital pampeana se dio luego de que los empleados iniciaran protestas y medidas de fuerza ante la seguidilla de escándalos protagonizados por el juez.
Fuente: El Diario de La Pampa