En la madrugada de este jueves, la Policía de Eduardo Castex protagonizó una prolongada persecución que culminó con la detención de un joven de 18 años, acusado de resistencia a la autoridad. El incidente comenzó cuando un móvil policial realizaba patrullajes de rutina en la intersección de las calles Leandro N. Alem y Sarmiento, y divisó un Chevrolet Cruze de color negro, cuyo conductor aceleró bruscamente al notar la presencia policial.
Según el parte oficial, el vehículo continuó su marcha a toda velocidad por Leandro N. Alem y luego giró por Eva Perón, dirigiéndose hacia la Ruta Nacional 35 en dirección sur. Los efectivos dieron aviso a sus pares de la Comisaría Departamental de Winifreda, ya que el automóvil seguía sin detenerse pese a las luces y sirenas encendidas.
Pasada las 4.30 de la madrugada, la Policía de Winifreda informó que el mismo rodado había retornado y entrado nuevamente a Eduardo Castex, esta vez transitando por un camino vecinal en la zona sur de la localidad. Pese a los intentos de interceptarlo, el conductor continuó su huida hacia el oeste en dirección a Conhelo, por la Ruta Provincial 102, por lo que se dio aviso a la subcomisaría local. Luego, se confirmó que también había pasado por Rucanelo y continuaba sin responder a las señales para detenerse.
Finalmente, cerca de las 5.30, el Chevrolet Cruze fue encontrado abandonado en la intersección de la Ruta Provincial 11 y la Ruta 6. Los uniformados notaron rastros de pisadas que se alejaban del vehículo, y tras un breve rastrillaje localizaron al conductor, escondido entre los pastizales al costado de la vía.
El joven, de 18 años, fue inmediatamente detenido por presunta “Resistencia a la Autoridad”, y el automóvil quedó secuestrado. Según confirmaron las autoridades, el Chevrolet Cruze estaba en reparación en un taller mecánico y fue utilizado sin consentimiento del dueño, quien ya presentó la denuncia correspondiente.
En el operativo participaron agentes de la Comisaría Departamental de Winifreda, la Subcomisaría de Conhelo, el Destacamento de Rucanelo, así como las dependencias de La Maruja y Luan Toro. La Fiscalía local tomó intervención en el caso para encabezar las actuaciones judiciales correspondientes.