Se trata de Patricia Carminati. “Viví en General Pico, La Pampa, hasta los 18 años. Estudié en Buenos Aires y me fui a la Patagonia. Empecé a trabajar en El Calafate como guía en 1989, y no paré más… luego me mudé a Europa”, relata la ganadora.
Great Wine Capitals es una red internacional que fue conformada para conectar ciudades con una característica común: la industria vitivinícola como actividad sobresaliente en ellas.
Desde MDZ estuvo en Verona participando en la gala mundial de excelencia de los premios Best Of Wine Tourism y nos encontramos una gran sorpresa: por Suiza ganó una argentina. ¿Qué hace allá?
Estas regiones mundiales del vino han sido consagrada como capitales internacionales de esta noble bebida, y con el objetivo de contribuir al bienestar y a la prosperidad de sus industrias, comunidades y turismo es que las mismas nutren y le dan empuje a esta institución global que facilita el intercambio de conocimientos, ideas y experiencias; estimula los negocios, la innovación, las vinculaciones y es un medio para colaborar en superar desafíos y aprovechar oportunidades de manera conjunta.
En la actualidad la red está formada por 12 regiones vitivinícolas de renombre mundial de los hemisferios norte y sur, que abarcan el viejo y el nuevo mundo del vino, y son: Adelaida, Australia del Sur; Bilbao-Rioja, España; Burdeos, Francia; Ciudad del Cabo-Cape Winelands, Sudáfrica, Lausana, Suiza; Mainz-Rheinhessen, Alemania; Mendoza, Argentina; Porto, Portugal; San Francisco-Valle de Napa, Estados Unidos; Valparaíso-Valle de Casablanca, Chile, Verona, Italia y Bahía de Hawke’s, Nueva Zelanda.
MDZ fue parte de la última gala mundial de premiación de los Best Of Wine Tourism, concurso que también lleva adelante esta red, y que destaca a las mejores prácticas relacionadas con el turismo del vino. La última edición se realizó en Verona, Italia; y Mendoza logró traer el premio para Bodega Trapiche en la categoría de Experiencias Innovadoras, con el vagón de tren Estación 83, un bar al aire libre que rinde honor a la historia del vino argentino pero que también se inspira en la alianza que tiene la bodega con el reconocido club de fútbol Inter Miami CF.
Los aplausos y vivas de las mesas argentinas fueron sonoros, pero el premio en sustentabilidad que se llevó Suiza también fue celebrado con ahínco y mucho entusiasmo. Quien subió a recibir el trofeo hablaba perfecto italiano, pero también un español bien argentino.
“Estoy muy feliz, no lo puedo creer. Soy argentina, y mi camino el mundo del turismo comenzó en Argentina, más precisamente en la Patagonia, en Santa Cruz”, dice exultante Patricia Carminati, que fue definitivamente una de las revelaciones de los últimos premios Best Of Wine Tourism.

Patricia se transformó en una de las “highlights” en la noche de gala de estos prestigiosos galardones al mundo del turismo enológico, pues su alegría y festejos en la mesa de Suiza -Lausana es una de las grandes capitales del vino, al igual que Mendoza- contrastaron con el aplomo y la seriedad habitual del mundo alnglosajón.
“¡Miren cómo festeja la chica de Suiza!, Decían los argentinos y chilenos presentes, acostumbrados a ser más fervorosos y apasionados a la hora de celebrar. Grande fue la sorpresa cuando descubrieron que era latina: una argentina viviendo hace años en Suiza. “¡Con razón ese festejo vehemente!”, comentaron.
En el siguiente video Patricia habla con MDZ y se quiebra por la emoción:
“Sin mis comienzos, sin mi experiencia argentina y todo lo que aprendí, este premio no existiría”, dice Patricia con una sonrisa de oreja a oreja. “Ya hace más años que vivo en Suiza que en Argentina, eso sí. Vivo en Lugano, en el sur, y nuestra empresa ha sido galardonada con el oro mundial por su trabajo en los rubros de medio ambiente y sostenibilidad. Este es un premio para mi, pero también para todo el equipo y para los productores de vinos y agricultores que involucramos en esta aventura”, sigue contando la galardonada.
“Yo nací en Trenque Lauque, pero viví en General Pico, La Pampa, hasta los 18 años. Estudié en Buenos Aires y me fui a la Patagonia. Empecé a trabajar en El Calafate como guía en 1989, y no paré más… luego me mudé a Europa”, relata la ganadora.
Las experiencia premiada es una vivencia que se creó para turistas que promueve el vino, la gastronomía, el paisaje y el patrimonio cultural de la región del Cantón de Tesino. Se trata de experiencias sencillas y auténticas que siguen las estaciones y el ritmo de la naturaleza: van desde la recolección participativa de hortalizas o frutas (vendimia) hasta el descubrimiento del proceso de producción (elaboración de vino, quesería), pasando por una visita a una empresa para conocer y entender la realidad del día a día de una bodega o finca.
Por supuesto, lo mejor de todo es degustar la excelente comida y el vino producido. Desde un plato de polenta, pasando por embutidos y quesos acompañados de una selección de vinos para descubrir los sabores de las especialidades culinarias y vitivinícolas del Tesino. El valor agregado de esta oferta lo aporta el hecho de que los huéspedes van acompañados de un guía turístico profesional que, gracias a su conocimiento de la zona y de la región en su totalidad, traslada a los huéspedes a lugares de interés cultural y turístico fuera de los circuitos habituales. El recorrido hasta el lugar de las agroexperiencias (en bicicleta, transporte público o a pie) se convierte así en parte integrante del programa.
“Hoy hay un crecimiento exponencial del turista que demanda experiencias sostenibles. Que quiere estar en contacto con la naturaleza, que desea que su alimentación sea orgánica o bien natural.
“El jurado valoró siete propuestas que ofrecemos y que se pueden personalizar en función del cliente (ya sean turistas individuales, empresas, grupos de amigos, familias). Las experiencias agrícolas que ofrece Patricia y su equipo se pueden reservar online, por supuesto. Cada experiencia agrícola está disponible en italiano y al menos otro idioma, además del inglés. Las agroexperiencias proponen siete itinerarios por el Tesino, con diferentes actividades y horarios. Gastronomía, artesanía, arquitectura, cultura, paisajes… una combinación perfecta para un enoturismo de calidad y para todos los gustos.

Una argentina orgullosa
“Yo pienso que cada experiencia turística debe ser como una obra maestra hecha a mano, es decir, diseñada solo para quien viene a vivirla”, dice Patricia al hablar de su trabajo. “Desde hace más de 25 años nos especializamos en crear actividades únicas y auténticas, inspiradas en el corazón y el alma de esta hermosa región. ¡Lausana es una maravilla!”, sigue entusiasmada.
“Me apasiona ofrecer experiencias a medida, adaptadas a la necesidad, los requerimientos, los deseos de cada cliente. Quiero que se sientan como en casa, pero al mismo tiempo, se sumerjan en un mundi diferente, impregnado de la verdadera esencia local”, explica.
“En todos estos años he construido una red de contactos first class, son colaboradores y proveedores que se asocian a mi servicio, y son cuidadosamente seleccionados para garantizar que cada momento del viaje sea una inmersión profunda en la autenticidad del lugar”, explica Carminati. “Meticulosamente estamos atentos a locaciones especiales, procuramos que disfruten de la mejor gastronomía, y hasta de tradiciones locales ocultas. ¿Un ejemplo? Durante un viaje en barco por los paisajes de ensueño del lago, los pasajeron pueden cocinar con un experimentado chef diferentes delicias -como un típico risotto- circundados por el mejor ambiente. Es fundamental que un viajero descubra que con nosotros hay una singularidad, una personalización que hace que el destino sea realmente inolvidable”.
A la hora de definirse, Patricia no duda: “Soy una trabajadora muy emocionada. Tengo mi agencia, Patricia Carminati Tourism consulting & Services, y un corazoncito dividido; la mitad es de mi orígen, Argentina, y la otra mitad del lugar de mi vida, Suiza”.