Con la llegada de las altas temperaturas y el incremento del consumo energético, la Cooperativa Regional de Electricidad y Otros Servicios de General Pico (Corpico) se encuentra afinando sus estrategias para garantizar la provisión de energía y prevenir cortes prolongados. Miguel Prieto, presidente de la cooperativa, brindó detalles sobre las inversiones, la tecnología empleada y los planes previstos ante posibles eventualidades del sistema eléctrico nacional.
Monitoreo continuo con sistema propio
Para anticiparse a sobrecargas, Corpico cuenta con un desarrollo tecnológico denominado Sistema SCADA, que permite monitorear en tiempo real el funcionamiento de subestaciones y transformadores distribuidos en la ciudad. “Este sistema de telemetría a distancia nos posibilita ver si algún transformador está al límite o directamente sobrecargado. Así, antes de que se rompa, decidimos sacarlo de servicio y evitar daños mayores”, explicó Prieto.
Dicha inversión se viene realizando desde hace varios años y se renueva periódicamente. Su finalidad es detectar los “puntos críticos” de la red eléctrica durante el verano, cuando se registra el mayor consumo de energía. La información recolectada es clave para planificar obras a lo largo del año. “Si un sector se ve muy exigido, invertimos para que el próximo verano ese problema no se repita”, detalló el presidente de Corpico.
El desafío de la “declaración de carga”
Prieto señaló que uno de los problemas habituales es la falta de actualización de la llamada declaración de carga. “Muchas veces, las familias o los comercios suman aires acondicionados, heladeras, soldadoras u otros equipos de alto consumo y no lo notifican. Eso nos complica la planificación porque los consumos terminan superando la capacidad prevista”, señaló.
Este trámite permitiría dimensionar con mayor precisión la oferta que se necesita en cada barrio y evitar imprevistos cuando varias viviendas incrementan de manera simultánea su demanda de energía.
Plan de contingencia ante un verano exigente
En la temporada estival, además de los requerimientos propios de la ciudad, la cooperativa está atenta a los pedidos del Sistema Eléctrico Nacional. “Desde Nación ya advirtieron que, en caso de que la demanda supere la oferta a nivel país, pueden bajar la orden a las provincias para reducir el consumo en las horas pico, entre las 13 y las 16”, sostuvo Prieto.
Para responder a esta situación, se definió un plan de contingencia provincial que se activa a través de la APE (Administración Provincial de Energía). Dentro de este esquema, los grandes usuarios (que representan aproximadamente el 10% de la demanda total de la ciudad) son los primeros en verse afectados. “Nos hemos reunido con ellos para explicarles que, si se emite la orden de disminuir el consumo, deberán suspender o posponer parte de su producción. O bien, buscar alternativas, como generadores”, aclaró.
Cortes rotativos como última instancia
Prieto resaltó que si la baja de demanda solicitada no supera el 10%, el servicio residencial de General Pico no se verá afectado. Sin embargo, advirtió que, de superarse ese umbral, la cooperativa podría verse obligada a implementar “cortes rotativos de no más de una hora” en distintos sectores de la ciudad.
“Todo depende de las condiciones del sistema eléctrico nacional”, enfatizó. No obstante, la cooperativa se mantiene alerta. “La ventaja de nuestro sistema de monitoreo es que podemos tomar decisiones rápidas y coordinar con los grandes usuarios para atenuar los picos de consumo, de modo que el impacto para el resto de los vecinos sea lo más leve posible”, finalizó.
De esta manera, Corpico ingresa a la temporada de mayor exigencia eléctrica con una estrategia basada en tecnología de vanguardia, un plan de contingencia consensuado con los grandes consumidores y el llamado a la comunidad a colaborar, principalmente actualizando la información sobre sus equipos y siendo conscientes de la importancia de un uso responsable de la energía en los meses más calurosos del año.