El especialista en tránsito, Bruno Miño, brindó su habitual columna. Escuchá el podcast.
“En el tránsito existe muchos riesgos, de hecho en nuestra ciudad tenemos muchas esquinas con estrellas amarillas lamentablemente. Todos los días hay colisiones y la mayoría son justamente en las esquinas”.
“Hay una situación en la cual pareciera que la mayoría no tiene en cuenta, y que en los cursos de capacitación deberían estar, que es el tiempo de reacción en función de la velocidad. El tiempo de reacción es cuando un conductor ve algo anormal en la vía pública, esa información entra por los ojos, el cerebro la procesa y a través del sistema nervioso central emite una orden”.
Un ejemplo: dejar de acelerar y frenar. “Los estudiosos estiman el tiempo de reacción en un segundo, esto quiere decir que si voy a 40 km y tardo un segundo en reaccionar, el vehículo recorre 11 metros hasta que empiezo a pisar el pedal, que hay que tener en cuenta cómo están las cubiertas, cómo el sistema de frenado y el peso del vehículo. Además de las condiciones climáticas”.
“Si uno cruza a 50 km una esquina, empezás a frenar cuando ya cruzaste, es decir, que el impacto es inevitable: hay un punto sin retorno. En la ciudad vemos muchas personas distraídas hablando por celular que para poder frenar en tiempo y forma, esa reacción es mucho más lenta”.
“No hay conciencia de riesgos: en nuestra ciudad nos falta esa conciencia y por eso hay accidentes todos los días, con un promedio de tres personas por día trasladadas a la guardia por hechos de tránsito”.
