Tras la inauguración del nuevo Refugio Canino en la ciudad el pasado 28 de julio de 2023, la Municipalidad de General Pico ha comenzado un proceso de traslado y adaptación de los canes que anteriormente se encontraban en la canilera ubicada en calle 44 esquina 5. Estas nuevas instalaciones representan un avance significativo en la atención y cuidado de los animales abandonados.
El Refugio Canino, ubicado en un predio cedido por la Universidad de La Pampa, no sólo buscará brindar un techo a los caninos abandonados, sino también fortalecer la cooperación entre las entidades a través de proyectos de extensión, investigación y la participación activa de estudiantes. Una de las novedades más destacadas es el traslado del quirófano, lo que permitirá realizar cirugías in situ.
En entrevista con el Med. Vet. Matias Calmels, Director de Zoonosis y Vectores de la Municipalidad de General Pico, nos brindó detalles sobre el estado actual de traslado y la adaptación de los animales al nuevo espacio. “No hemos podido trasladar a todos los animales aún. Hoy contamos con 55 animales alojados en el nuevo refugio y en breve planeamos trasladar entre 18 a 20 más”, indicó Calmels.
Calmels también señaló la importancia de hacer pruebas de convivencia en ambos refugios. “Estamos trabajando de manera dual entre los dos refugios. Realizamos pruebas de convivencia en el viejo y el nuevo refugio, y mientras se van trasladando los animales y se desocupan los caniles del viejo refugio, aprovechamos ese material en caso de ser necesario para el nuevo establecimiento”, detalló.
Sobre el total de animales que aún deben ser trasladados, el director de Zoonosis y Vectores precisó: “Quedan alrededor de 130 o 150 animales más o menos para completar el traslado”.
No obstante, el Med. Vet. Matias Calmels destacó las notables diferencias en el comportamiento de los canes en el nuevo refugio. “Lo sorprendente es que prácticamente pasan todo el día echados y no se les escucha ladrar. Parece un refugio donde los animales no ladran, lo cual es inusual, pero muestra lo tranquilos que están en este nuevo entorno. No tienen los estímulos externos que antes los alteraban”, explicó.
El refugio cuenta con avanzadas instalaciones, tales como una hectárea de superficie con caniles “comunitarios” e “individuales”, un sistema de cámaras de seguridad, y próximamente, un servicio de seguridad privada. Además, ante la proximidad del calor, se está trabajando en adaptar la estructura para garantizar sombra y confort a los animales.
Este nuevo espacio no sólo refleja una mejora en la infraestructura y atención a los canes abandonados, sino que marca un precedente en la colaboración y responsabilidad compartida entre instituciones públicas y privadas en pos del bienestar animal.
