La primera semana de agosto se celebra en todo el mundo la semana mundial de la lactancia materna para brindar información, contención y concientización sobre la fundamental importancia de que un niño se alimente con leche materna hasta los dos años. Una de las pioneras en la concientización en General Pico y La Pampa, es la pediatra Graciela Álvarez, que a pesar de no atender más a los pequeños, sigue trabajando con el equipo de salud en esta importante temática.
La Semana Mundial de la Lactancia Materna, que se celebra todos los años del 1 al 7 de agosto, es una campaña mundial coordinada por la Alianza Mundial para la Acción de Lactancia Materna para crear conciencia y estimular la acción sobre temas relacionados con la lactancia materna.
En diálogo con Infopico Radio 99.9, Graciela explicó que “el lema de este año es ´promover y sostener la lactancia al volver al trabajo´, que no es nada fácil, porque si bien hay leyes que protegen a la mamá y al bebé, con las licencias, no siempre se cumplen y en la práctica no es tan fácil que una mamá pueda sostener la lactancia al regreso del trabajo. La provincia de La Pampa tiene mejores condiciones para las trabajadoras que en otras provincias”.
“Las distintas organizaciones internacionales que trabajan en pos de la alimentación infantil son los que definen el lema para cada año y uno de los pilares es informar a la comunidad, a las madres, al equipo de salud, a los empleadores que deben entender que una mamá que amamanta va a faltar mucho menos al trabajo porque su bebé se va a enfermar menos, no va a gastar en medicamentos ni en leches modificadas“, detalló la doctora y reveló que “hay un programa de UNICEF que en Argentina se convirtió en ley que se llama los 1000 días: abarca el período del embarazo y hasta los primeros dos años del bebé. Se basa fundamentalmente en la nutrición, tanto de la mamá como del niño”.
“¿Y por qué es tan importante la lactancia materna en estos dos primeros años de vida?“, se preguntó Graciela y respondió que “la leche de mamá va a ser la que programe a ese bebé para una salud futura. No solo damos de mamar porque la leche es la mejor o la única, sino que estamos programando a los hijos para que sea un adulto sano sin las enfermedades crónicas como diabetes, el colesterol, la obesidad, etc”.
“El bebé, desde que comienza a mamar, forma un millón de conexiones neuronales por segundo: durante los primeros dos años, el cerebro del bebé es cuando más se desarrolla y crece; entonces queremos niños inteligentes rodeados de un entorno familiar, social y laboral que permita que la mamá pueda sostener la lactancia”, subrayó.
“Hay tres cosas que me parecen fundamentales: mamar, jugar y amar. Son tres pilares en los cuales la familia, el papá y la red de contención debe acompañar porque es importante ayudar a la mamá desde el sostén y el amor” resaltó Graciela.
