La intendenta Fernanda Alonso realizó un recorrido la semana pasada por el ex Molino Fénix, propiedad de la familia Margaría, sitio donde se lleva a cabo el procesamiento de Neumáticos Fuera de Uso que luego son enviados a una empresa de la provincia de Córdoba que tiene como objetivo su tratamiento y reciclado.
Tras observar el funcionamiento del lugar, Carol Castillo, la encargada del área de Gestión Ambiental del municipio, indicó: “Hemos logrado establecer una alianza para la gestión de NFU teniendo en cuenta que llegan a la estación de transferencia y no deben ir al basurero, por lo que deben ser tratados de manera diferenciada con la posibilidad de procesarlos y recuperar materiales para fabricar nuevos productos. Hace un tiempo estamos desempeñándonos conjuntamente con Margaría para ello”.
Manifestó que “comenzamos el año pasado con la experiencia logrando enviar 57 toneladas, pero mediante investigación y ensayos se encontraron alternativas para reducir el tamaño de los neumáticos fuera de uso para optimizar el traslado de estos elementos”.
“Se hicieron varias reuniones con instituciones técnicas del medio conjuntamente con docentes y alumnos de la EPET N°2, ellos estaban avanzando en un proyecto similar con plástico, integrando la parte de diseño para desarrollar un dispositivo apto para molienda de caucho. En esto hemos podido vincular tanto al municipio, como a una empresa privada y la parte académica” con el objetivo de promover experiencias locales que optimicen el manejo de residuos de la ciudad.
Castillo agregó que este espacio les permite concretar la etapa de la disminución de volumen para el despacho de los neumáticos generados en la ciudad. “La voluntad a futuro es desarrollar una planta regional de reciclado para neumáticos fuera de uso, de tal forma que este material, considerado un residuo universal, tenga un sitio de gestión local para bajar costos y aprovechar sus materiales, que son potencialmente valorizables”, amplió.
La directora agregó que esta labor conjunta “surgió por las necesidades que tenía la comunidad, y lo veíamos en la recolección especial, salían muchos neumáticos que, por plan GIRSU, no pueden ir al basurero por lo que segregarlo es una estrategia en la gestión adecuada de residuos evitando que vayan a disposición final”.
