1638 y 1994 son dos fechas inolvidables para los amantes del juego de cada parte del mundo. Mientras que a la primera se remonta la apertura del Ridotto di San Moisés de Venecia – el primer casino legal de la historia en formato físico – a la segunda se debe el lanzamiento en la web de la primera sala de juego autorizada de siempre por parte del Gobierno de Antigua y Barbuda.
Estos eventos han llevado a la apertura de miles de lugares de este tipo, que con el tiempo han facilitado el acceso a títulos como el blackjack, el póker y la ruleta de un número cada día creciente de personas. Además de estos, uno de los juegos tradicionalmente más queridos por el público en general es la máquina tragaperras, de la cual se presentará a continuación la evolución a lo largo de los años.
La máquina tragaperras, desde su invención hasta la actualidad
La versión mecánica
El lanzamiento al mercado del primer modelo de tragaperras de la historia tuvo lugar en Los Ángeles en 1895 por parte del mecánico bávaro Charles August Fey. Inmediatamente, la “Liberty Bell” – este es su nombre – se distinguió por su funcionamiento bastante intuitivo pero no por esta razón simple.
De hecho, los jugadores sólo tenían que accionar una palanca después de haber insertado una moneda y esperar que salieran tres símbolos iguales para así ganar un premio. No obstante, para que esto pudiera ocurrir era presente un sistema mecánico de vanguardia constituido por carretes, engranajes, levas, tapones y discos dentados de varios tipos.
La versión electromecánica
Para asistir a una evolución significativa de la “Liberty Bell” hubo que esperar unas siete décadas, para ser exactos hasta 1964. Ese año, de hecho, salió al mercado la “Money Honey”, un modelo que, ideado por la compañía Bally Technologies, no se apartaba demasiado del anterior desde el punto de vista estético.
A pesar de que para accionarlo se debía todavía utilizar una palanca manual, sus rodillos funcionaban de forma completamente eléctrica. Además de esto, su innovación más significativa fue la introducción de una bandeja para recoger las posibles ganancias, que desde entonces pudieron alcanzar un máximo de 500 fichas por tirada.
La versión de vídeo
Para presenciar el nacimiento de la primera slot totalmente electrónica hay que dar un pequeño salto hasta 1976. Ese año, la empresa Fortune Coin lanzó este modelo en Los Ángeles antes de introducirlo poco después en el Hotel Hilton de Las Vegas, ciudad donde comenzó a ganar una gran fortuna después de un primer período de escepticismo general.
Casi inmediatamente, la palanca comenzó a ser reemplazada por botones; además, esta tragaperras montaba una pantalla de 19 pulgadas en sustitución de los rodillos mecánicos tradicionales. Así mismo, a partir de la siguiente década se empezó a introducir el Random Number Generator (RNG) – un microprocesador que garantiza el carácter aleatorio del juego – y a hablar de Return to Player (RTP) – el porcentaje de ganancia por unidad apostada que cada máquina asegura.
La versión en línea
Gracias a las recientes innovaciones tecnológicas, las tragaperras han dado un salto decisivo en adelante. En el último cuarto de siglo, de hecho, si la difusión del Internet ha llevado al nacimiento de un gran número de casinos online, el perfeccionamiento de los Smartphone ha sido crucial para permitir a sus clientes disfrutar de una partida desde cualquier lugar y en todo momento.
Además, la ausencia de las limitaciones físicas típicas de las salas tradicionales hace que los jugadores puedan elegir entre un número casi infinito de tragaperras y aprovechar de promociones ventajosas como las tiradas gratuitas y los bonos de bienvenida. Para experimentar de primera mano todos estos beneficios, se recomienda probar estas tragaperras online.
Además de esto, también se señala que estas últimas, en comparación con sus contrapartidas físicas, ofrecen una mayor probabilidad de ganar. Esto se debe al hecho de que no sólo su RTP es más alto – correspondiendo generalmente a un valor comprendido entre un 96 y un 98% – sino que también es más elevado el número de líneas de pago y de símbolos por rodillo presentes – igual a un máximo de 1.000 y 250 respectivamente.
La extraordinaria evolución de las tragaperras, en conclusión
Aunque tienen más de un siglo de vida, las slot parecen no envejecer nunca. Su nivel de atractivo a los ojos del gran público, de hecho, se mantiene inalterado o, mejor, está en constante aumento gracias a su extraordinaria capacidad de evolucionar.
Como se ha ilustrado en este artículo, sus fases más significativas son la mecánica, la electromecánica, la vídeo y la online. Teniendo en cuenta estos antecedentes, se puede estar seguros de que, en un futuro próximo, las tragaperras tendrán grandes sorpresas para los que quieran probar suerte en ellas.
