La flamante jueza en la Cámara de Apelaciones en lo Civil, Estela Rodríguez, compartió sus impresiones sobre su reciente nombramiento como miembro en esta área de la Segunda Circunscripción Judicial de La Pampa, con sede en General Pico. Rodríguez, quien asumió el jueves, se convierte en la primera mujer en ocupar este cargo desde su constitución en 1994.
Cuando le preguntamos cómo le tomó la noticia de su nombramiento, Rodríguez respondió: “En realidad me tomó muy de sorpresa todo esto. Yo ya había planificado que profesionalmente iba a ir bajando un poco un cambio y bueno, surgió la posibilidad de inscribirme como funcionaria sustituta, lo hice y así fue que me designaron y asumí en el día de ayer”.
La jueza se muestra comprometida con su nuevo rol, asegurando que su principal objetivo es “ser criteriosa y justa”. Además, confesó que no era consciente de que, en caso de ser nombrada, sería la primera mujer en integrar la cámara. “Si me pongo a hacer memoria a todos los que han pasado por acá, sí, una mujer fue, tuvimos grandes juristas, grandes juristas que han trabajado en este sector”, reflexionó.
Rodríguez también abordó la importancia de incorporar la perspectiva de género en la administración de justicia: “Hoy en día el tema del género y lograr los cupos de la participación de la mujer me parece muy importante porque hay una mirada distinta en muchas cosas, quizás en familia, donde más se vea reflejada, en valoraciones de daños morales, el análisis de una madre para la pérdida de un hijo, es muy importante“.
La jueza desestimó la idea de un “techo de cristal” que impida el ascenso de mujeres a cargos de responsabilidad en el ámbito judicial, alegando que no se habían dado las circunstancias adecuadas en el pasado. Sin embargo, reconoció las dificultades que enfrentan las mujeres a lo largo de sus carreras profesionales y personales.
Finalmente, Rodríguez se mostró optimista sobre el desafío de administrar justicia en su nuevo cargo: “Yo creo que hay que mantener una cierta cordura o un criterio y se puede lograr”. Con este histórico nombramiento, la Cámara de Apelaciones de General Pico avanza hacia una mayor diversidad y equidad de género en sus filas.
