Su papá se durmió y el menor, de tres años, se trepó a un mueble y quedó arrodillado en el borde de una ventana. Lo salvó un vecino con ayuda de la Policía.
Una escena dramática se vivió este miércoles en el barrio Tranviarios de la ciudad de Córdoba, cuando un nene de tres años estuvo cerca de caer al vacío desde el segundo piso de una vivienda en la cual estaba junto a su padre, quien dormía. El menor se asomó a la ventana y quedó arrodillado sobre el borde de esa abertura, de espaldas al exterior de la vivienda.
El episodio, que ocurrió en la esquina de Duarte Quirós y Juan Bautista Gaona, no se convirtió en una tragedia porque un vecino logró trepar hasta el lugar donde se encontraba el menor y pudo rescatarlo. La secuencia quedó registrada en varios videos.
En uno de ellos se ve primero al nene parado en la ventana. Luego, se arrodilla. Un hombre, desesperado, accedió a una especie de patio en el primer piso del inmueble, trepando desde la vivienda contigua.
Luego, con ayuda de dos policías, se cuelga de la ventana desde donde estaba el nene y con la ayuda de sus piernas logra impulsarse en la pared y finalmente cae en el interior junto al menor.
Uno de los agentes, aliviado, caminó hacia el borde del balcón y levantó su pulgar, para llevar tranquilidad a los vecinos que esperaban en la calle una resolución positiva de la situación.
Según su abuela, “el nene no estaba solo”
La abuela del menor contó que el nene estaba al cuidado de su padre, quien “se quedó dormido por el cansancio”, ya que lleva a su mujer al trabajo en horas de la madrugada.
“Mi hija trabaja muy temprano, el marido la lleva a las 5 y media. Yo me cruzo a cuidarlo hasta que él vuelve, son 15 minutos. El papá se durmió, él trabaja a la tarde y mi hija sale a las 12”, contó en diálogo con Cadena 3.
Además, reveló cómo llegó su nieto al borde de la abertura: “El niño se despertó, juntó un mueble y como duermen con las ventanas abiertas por el calor, se trepó”.
“No estaba solo. Hay testigos que cuando llegó la Policía el padre los recibió. Se durmió por el cansancio”, agregó la mujer, quien quiso aclarar puntualmente que “los niños nunca están solos”.
Fuente: clarin.com