En la mañana de hoy se llevó a cabo la 15° sesión del Concejo Deliberante de General Pico, donde dos de los temas más importantes que se debatieron en el recinto, corresponden a la extensión del convenio de la “Cooperativa Don Alberto” y al lanzamiento de una normativa a favor de la inclusión de personas con discapacidad.
En diálogo con “La Redacción” el presidente del Concejo Deliberante, Daniel López, explicó algunos detalles del encuentro, focalizándose en dos temas. Primero, la renovación del convenio de concesión con la cooperativa “Don Alberto” y segundo, sobre una nueva ordenanza referida a la entrega de obleas adhesivas con el símbolo internacional de la sordera.
La cooperativa “Don Alberto” se encarga de la separación y recuperación de los residuos sólidos urbanos en la ciudad. Separan la basura, de la cual utilizan ciertos materiales, como cartón, aluminio, o plástico, para reciclarlos a cambio de dinero.
“Ahora se firma un convenio con ellos para que puedan sigan realizando este trabajo. Esta concesión y servicio es muy importante, pensado en la estabilidad laboral, llegando a un acuerdo por un nuevo canon mensual, que se extenderá hasta junio del próximo año” añadió.
Luego de reuniones con funcionarios municipales y el concejo administrativo de la cooperativa, se llegó a un acuerdo ante el incremento de los precisos de los elementos de trabajo, en conjunto con un aumento salarial para los trabajadores. “En el primer semestre del convenio, es decir, de julio a diciembre de este año, el total era por 4.616.000 $. Y el segundo semestre, que es de enero a junio del 2023, será por 5.400.000 $ aproximadamente” detalló el presidente del concejo.
Por otra parte, fue aprobada por unanimidad la Ordenanza por medio de la cual se dispone la entrega de dos obleas adhesivas con el símbolo internacional de la sordera, destinada a aquellas personas sordas o hipoacúsicas, que tramiten sus licencias de conducir tanto sea primera vez como renovación.
La idea es que cada conductor coloque las obleas en la luneta trasera y parabrisas delantero del auto que conduce. Así, se pretende alertar al resto de las personas que conducen para que utilicen señales lumínicas en reemplazo de las sonoras, evitando posibles riesgos.
“La finalidad es la integración de las personas con discapacidad que circulan por la ciudad en vehículos” concluyó López.
