En diez días se vota en La Pampa y las campañas electorales, que tratan de ganarle a la apatía de la gente, entran en la recta final. En estas PASO, en las estrategias del Frente de Todos y de Juntos por el Cambio, hay una coincidencia que quedó en evidencia por los esfuerzos que se realizaron de un lado y del otro: los votos del norte se van a pelear como si de ellos dependiera el resultado.
Tanto desde el oficialismo como desde las dos principales listas de Juntos por el Cambio, el interés se puso en tratar de obtener la mayor cantidad de votos en los departamentos de la punta: Maracó, Quemú Quemú, Chapaleufú y Realicó. Una zona delicada para el Frente de Todos por el componente agropecuario y el voto refractario al kirchnerismo, una zona definitoria para la interna de Juntos por el Cambio.
El epicentro es General Pico. Un bastión peronista, y del ex gobernador Carlos Verna, que apuntaló su poder. Pero que también tiene un fuerte componente opositor que se ha incrementado con los años. Ahora el gobernador Sergio Ziliotto apunta a sostener un votante propio. Hay una paradoja para el peronismo: mientras que en las ejecutivas gana y bien el PJ, en las legislativas nacionales la oposición le hace fuerza. En 2017 el PJ llegó a perder y en 2019 su resultado no fue el mejor.
En otros dos departamentos del noreste, centrados en Intendente Alvear y Quemú Quemú, en las elecciones nacionales el peronismo la pasa mal. El voto sectorial produjo derrotas importantes para el oficialismo.
El peronismo apunta todos los misiles a hacer la mejor elección posible en esa zona. Hubo visitas de las y los candidatos a las localidades y se observaron gestos como el inicio de obras importantes para cada pueblo.
Para Juntos por el Cambio también es una zona casi definitoria. Las fórmulas Kroneberger-Maquieyra y Altolaguirre-Pérez apuntan todos los misiles al reducto opositor. Maquieyra es un dirigente instalado en General Pico donde fue dos veces candidato, una vez a intendente. Juega de local. Y el PRO cosecha votos en los cuatro departamentos. Son departamentos agropecuarios donde la agenda rural (retenciones y exportaciones de carne) marcan buena parte de la disputa entre el peronismo y la oposición. Kroneberger suma también en Colonia Barón. Ambos además se han interesado ganar Intendente Alvear, capital del voto anti-K.
Altolaguirre y Pérez trataron de descontar en el norte. Apenas largó la campaña se instalaron en General Pico buscando apoyos y pidieron el voto en Realicó, donde apoya el comité radical, o en Intendente Alvear.
Aunque muchos votos estén en Santa Rosa, el norte será un lugar estratégico cuando se abran las urnas el 12 de septiembre. Y todos quieren tener el boleto ganador.
