La ex ministra de Seguridad, que participó el pasado domingo de una marcha opositora al Gobierno en la capital provincial, reconoció que utilizó tickets emitidos por el Congreso a instancias de la senadora Laura Rodríguez Machado.
Patricia Bullrich fue una de las principales promotoras del 8N, la marcha opositora al Gobierno que se realizó en diferentes puntos del país el pasado domingo. La ex ministra de seguridad se encargó de mostrar en sus redes sociales fotos del encuentro, que compartió con un grupo de diputados y senadores, que tuvo como consigna “la defensa de la república y el apoyo a los jueces Bruglia, Bertuzzi y Castelli”, entre otras consignas.
En las últimas horas, diferentes medios de comunicación dieron cuenta de que la ex funcionaria de Cambiemos utilizó tickets emitidos por el Congreso a instancias de la senadora Laura Rodríguez Machado para realizar ese viaje fugaz. Para Bullrich, el incidente se trató de “una confusión administrativa”.
“Voy a devolver el dinero del pasaje a Córdoba, devolverle la plata al Senado, porque es dinero de la gente. Un procedimiento legal pero que riñe con mi ética y la de la senadora”, indicó en su cuenta de twitter.
Rodríguez Machado, entrevistada en radio Cadena 3, reconoció este hecho y explicó cómo fue el procedimiento: “Los senadores tenemos 10 pasajes al mes para cuestionas de personas que no revisten cargos dentro del Senado pero si, por razones políticas, pueden trasladarse dentro de la argentina”, comentó la senadora.
Y amplió: “(El domingo) tuvimos otras actividades políticas inherentes a mi función y, además, se asistió a la marcha; es un procedimiento legal, lo solicito y lo autoriza el sector administrativo del Senado. No hay ninguna cuestión ilegal; si la hay, que la denuncien, sino esto tiene un tinte político y no lo vamos a permitir, porque actuamos conforme a derecho”.
Hasta mediados de 2019, en el Senado funcionaba un sistema que permitía a los senadores canjear por dinero en efectivo 20 pasajes de avión y 10 ómnibus cada mes y así hacerse, de acuerdo reveló Infobae en ese momento, de un sobresueldo que llegó a ser de más de 90 mil pesos mensuales.
En julio de ese año, la entonces presidenta de la Cámara Alta, Gabriela Michetti, modificó este esquema y estableció que todos los empleados puedan solicitar diez pasajes por mes, ya sean terrestres o aéreos, que serán “nominados, intransferibles, con vencimientos mensuales, no renovables y no canjeables, para su uso dentro del territorio nacional”.
Con relación a la protesta opositora, Bullrich arengó a los militantes de Juntos por el Cambio en la ciudad de Córdoba. “Vinimos a pedirle a los jueces Bruglia, Bertuzzi y Castelli que no renuncien a sus causas. Por ellos, en defensa de las instituciones y por el futuro, hoy nos sumamos al banderazo #8NTodosALasCalles”, publicó en Twitter en la previa de la manifestación.
Como en otras oportunidades, en la ciudad de Buenos Aires el epicentro fue el Obelisco: los manifestantes comenzaron a llegar pasadas las 16 con banderas argentinas y carteles con consignas políticas. Por primera vez, el banderazo opositor no entró en conflicto con la cuarentena ya que el pasado viernes Alberto Fernández anunció el comienzo de una nueva etapa en el AMBA: el DISPO (Distanciamiento Social, Preventivo y Obligatorio).
Además, la protesta tuvo réplicas en las principales ciudades del país e incluso fue motorizada desde algunos sectores como el Campo, sensibilizado luego de la ocupación ilegal del predio de los Etchevehere en Entre Ríos por parte del dirigente social Juan Grabois.
Cientos de personas también se concentraron el domingo frente a la Quinta de Olivos con cacerolas, entre ellos los economistas Javier Milei y José Luis Espert, y Juan Carlos Blumberg. En esa oportunidad, ningún sector del peronismo organizó una “contramarcha” en favor de Alberto Fernández en la puerta de la residencia oficial.
Fuente: infobae.com