El funcionario provincial afirmó que son “dolorosos”, los datos de la pobreza en el país y también en la provincia de La Pampa. En la geografía pampeana el índice de pobreza bajó con respecto al mismo semestre del año 2019 y lo que si se incremento fue la indigencia producto de que, esta pandemia, donde más ha golpeado es en el trabajo informal.
En La Pampa lo que ha medido el INDEC es el conglomerado de Santa Rosa, Toay. “ No esta medida la provincia de en su totalidad”, remarcó. Los números que arrojó esta medida indica que hay un 33% de pobreza y dentro de este contexto el 8,9% son indigentes. “La indigencia esta medida dentro de la línea de pobreza, dentro de esa línea 1 de cada 3 pampeanos está bajo la línea de indigencia”, dijo Álvarez.
Señaló que “son datos duros, dolorosos. Esto es producto de la situación económica que se venía viviendo y una pandemia que ha hecho un impacto muy fuerte en la economía y repercute en la situación personal de la familias argentinas y pampeanas”.
Sostuvo que la pobreza ha bajado en forma porcentual “lo que ha subido dentro de esa línea es el nivel de indigencia. Esto habla de que no hay un ingreso en esa familia que garantice una alimentación básica”.
Afirmó que “el desafío es tratar de generar herramientas de trabajo para que la gente pueda acceder a ingresos y mejorar su situación personal”.