Según confirmó a infopico.com el intendente de Villa Huidobro, Silvio Quiroga, «lamentamos el deceso de una persona de nuestro pueblo, de un conciudadano, que no pudo ingresar ahí en Realicó, La Pampa. Hay una clínica que realiza las prestaciones medicas correspondiente a APROS y a PAMI».
Un paciente de 71 años de Villa Huidobro, que tenía cobertura del Pami en la Clínica Santa Teresita de La Pampa, no pudo atravesar el límite interprovincial y tuvo que ser trasladado de urgencia hacia Río Cuarto, pero murió en el camino.
Villa Huidobro está a 45 kilómetros de Realicó, mientras que hasta Río Cuarto hay 217 kilómetros. «Toda la gente del departamento de General Roca y en ese contexto se trató de derivar a este paciente, pero le impidieron el ingreso. Por lo tanto nosotros tuvimos que salir con el paciente a Rio Cuarto; no es lo mismo hacer 30 kilómetros, porque en ese momento el paciente estaba en Huinca Renanco, que hacer 200 kilómetros. No se le pudo brindar la asistencia medica que la urgencia requería, porque tenia el diagnostico de un edema pulmonar grave, y no estaba relacionado al COVID-19», señaló Quiroga.
«Con respecto a la mesa de dialogo, lo conozco por las redes sociales y a través de los medios. Pero a mi no me ha llegado nada oficial, en absoluto. Lo único que se es que el juez de control de Huinca Renanco anuncio que hay un señor Vera, que aparentemente es el subsecretario de salud de La Pampa, y que habrían manejado la posibilidad y principio de arreglo, que en realidad si eso es un arreglo bueno… que le autoricen la salida al anestesista 1 vez por semana, más que un arreglo es un parche lastimoso», afirmó ofuscado.
«Es un parche lastimoso a una situación donde nosotros no necesitamos que le dejen salir una vez por semana. Las urgencias nosotros no la podemos programar, que hacemos con una vez por semana que dejen salir al anestesista, que lo dejen visitar el hospital de Huinca Renanco y Villa Huidobro», sentencio.
¿Esto sucedía regularmente, o había un paso con justificación?
«Se venía trabajando bien, bastante bien. Históricamente fue una zona desde el punto de vista sanitario totalmente integrada. Con respecto al COVID se venía trabajando bien y después el día 16 de septiembre, no le permitieron al anestesista que trabaja en nuestro pueblo y en el hospital de Huinca Renaco, le dijeron que si salía tenia al regreso hacer cuarentena. Que en la practica es impedirle que asistiera al parto. Nosotros con esa realidad tuvimos que salir a llevar a la mama que iba a tener familia a Laboulaye y en el trayecto, a los 70 kilómetros, se produce un parto dentro de una ambulancia».
