La Municipalidad de General Pico, a través de la Secretaría de Planificación Urbana, llevó a cabo durante estos últimos días el servicio y mantenimiento de la Planta de ósmosis inversa de barrio Villa Borgna, conocido como Trebolares, con la finalidad de que las y los vecinos del sector vuelvan a proveerse de agua de calidad.
Esta planta fue una obra elegida por los vecinos de dicho barrio, mediante el programa de participación ciudadana Presupuesto Participativo, instalándose por el municipio el año pasado. Consiste en una perforación para captación de agua cruda y una planta de ósmosis inversa que permite tratar el agua dejándola con una calidad apta para el consumo humano.
Este sistema de desalinización de agua, trabaja ejerciendo una cierta presión con una bomba adecuada sobre una membrana. La misma está compuesta por un conjunto de tanques, bombas, filtros, membranas y sensores que permiten el correcto funcionamiento.
Además, en su última etapa, el agua es tratada para un sistema de control bacteriológico a partir de dosificación de un agente oxidante de gran capacidad de desinfección, gran poder residual y que tiene la ventaja de no generar gustos en el agua que trata.
La planta instalada tiene una capacidad de producción de 200 litros, puesta a disposición de los vecinos de Villa Borgna a través de una canilla que fue colocada en la vereda de la comisaría local con el fin de que la gente pueda llevar sus bidones y llenarlos sin costo alguno durante las 24 horas del día.
El sistema lleva más de un año funcionando, por lo cual el municipio contrató el servicio que cambió todos los filtros, volviendo a colocar una cantidad específica de dióxido de cloro, el producto utilizado para desinfectar el agua tratada.
En este contexto, entonces, la planta ya fue regulada y quedó a punto para que los vecinos vuelvan a tener agua de calidad.
