Ayer, la abogada especialista en derecho de familia Marisa Graham consiguió el respaldo del Senado y se convirtió, así, en la primera defensora nacional de Niñas, Niños y Adolescentes, cargo creado en 2005 y que nunca había sido ocupado hasta el momento.
La designación fue aprobada por 47 votos a favor y 21 en contra y Graham durará en el cargo por los próximos cinco años, con la posibilidad de aspirar a una reelección por un segundo mandato.
La nueva funcionaria juró el cargo en el recinto, apenas unos minutos después de haber recibido el respaldo de la Cámara alta, en medio de los aplausos de los presentes en los palcos.
Respecto a esta asunción, la senadora nacional Norma Durango aseguró que “celebro profundamente este debate, celebro el tratamiento después de tantos años de espera de la designación de la primera defensora nacional de niñas, niños y adolescentes, en un todo de acuerdo con la ley 26.061, que creó el sistema de protección integral de los derechos de las niñas, niños y adolescentes e instituyó la figura del defensor con un rol fundamental:
velar por la promoción y protección de sus derechos”.
Además, agregó que “se ha dicho hasta el cansancio: estamos saldando una deuda. Deuda que tenemos todas y todos con las niñas, niños y adolescentes de nuestro país, que no pueden seguir esperando más por la garantía de sus derechos y su defensa ante las instituciones públicas y privadas”.
“La designación del defensor o defensora fue un proceso llevado a cabo responsable e integralmente por la Comisión Bicameral creada por la ley 26061, y en un todo de acuerdo con las indicaciones que esa legislación determina” detalló Durango.
Del mismo modo, la senadora agregó que “durante dos años hemos trabajado codo a codo en esta Bicameral realizando un proceso histórico, único, compartido, serio con un único y claro objetivo: terminar con esta espera y que las niñas y niños de nuestro país, cuenten finalmente con una figura que resguarde el cabal cumplimiento de sus derechos”.
En sus declaraciones, Durango sostuvo que “basados en el diálogo, buscando coincidencias, aprovechando experiencias y saberes, más allá de partidismos, se realizó un proceso transparente y ejemplar de designación”.
Finalmente, la senadora señaló que “nos enorgullece contarlo. Y nos honra haber sido parte de una experiencia de designación inédita, con audiencias públicas, y concurso público”.
