Ciro Fernández tiene dos años, padece una miocardiopatía dilatada congénita y entró en emergencia nacional por un trasplante cardíaco. Su familia pide concientizar sobre la importancia de la donación de órganos pediátricos.
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“Soy una mamá desesperada que sueña todos los días con que llegue esa llamada y nos digan que apareció el corazón que Ciro necesita”, dice Carla, la mamá del niño.
Es que el pequeño, de dos años padece una miocardiopatía dilatada congénita y entró en emergencia nacional por un trasplante cardiaco. “Su corazón de a poco está bajando sus funciones”, cuenta.
Por eso, la familia de Ciro pide a la sociedad en general que tome conciencia sobre la importancia de la donación de órganos pediátricos.
“Le puede pasar a cualquiera. Si por una mala jugada de la vida tenes que sufrir algo tan feo como una pérdida de un hijo a pesar del sufrimiento y dolor lo que pedimos es que lo piensen dos veces y le puedan dar la posibilidad de que una parte de tu ser querido pueda siga viviendo en Cirito como en cualquier otro niño”, relata Carla.
Actualmente, Ciro y su familia están viviendo en Capital, ya que en caso de aparecer un donante, el niño tiene que estar en menos de dos horas en el nosocomio para que se pueda realizar la intervención.
“Del Garrahan nos recomendaron que nos vengamos a Capital y por suerte la obra social se hizo cargo de todo y nos brindó un departamento donde puedo hacer toda la dieta de Ciro”, detalla su madre.
“No puedo explicar lo que duele ver que la vida de tu hijo pende de un hilo y no podes hacer nada más que estar firme al lado suyo y darle la mano siempre”, relata Carla al tiempo que insiste en la importancia de la donación de órganos.
Fuente: 0223.