Una vecina declaró que lo vio llorando en brazos de un joven al que le pedía que lo baje.
gentileza La Gaceta
“Ya vengo, voy a jugar”, fue lo último que le dijo el nene de 4 años a su abuela cuando salió a la vereda de su casa en el municipio tucumano de Las Talitas. El cuerpo de Benjamín fue encontrado unas horas después, colgado de un puente y con signos de haber sido ahorcado. En medio del dolor, su mamá aseguró: “Alguien se lo llevó engañado”.
Cuando el nene ingresó al Centro de Atención Primaria de Salud (CAPS) ya no respiraba y no hubo nada que los médicos pudieran hacer para salvarle la vida. En base a las primeras pericias, el fiscal a cargo de la investigación, Alejandro López Isla, descartó que la víctima se haya colgado por sus propios medios.
En el mismo sentido se expresó la psicóloga que participó del caso. Según publicó La Gaceta, sostuvo que a esa edad los chicos “ni siquiera conciben la muerte” y afirmó: “Entendemos que hubo un homicidio”.
Los padres de Benjamín lo habían dejado a cargo de un familiar para ir a trabajar y cuando volvieron descubrieron con horror que su hijo había desaparecido. Una vecina declaró a la justicia haber visto al nene llorando en brazos de un joven. “Le decía que lo baje”, dijo la mujer a Contexto Tucumán. El dato se convirtió en la única explicación posible para la mamá de la víctima. “Alguien lo llevó engañado, porque él sabe que no tiene que moverse de acá”, remarcó.
La familia de Benjamín está destruída. “Sólo una persona inconsciente pudo haber hecho esto. El nene desapareció 10 minutos de su casa y luego apareció muerto en el puentecito, totalmente ahorcado. Me lo dieron dormidito”, manifestó entre lágrimas su abuelo, y añadió: “Él era un amor. Un malviviente nos ha destrozado haciendo esto”.
El resultado de la autopsia será determinante para saber si efectivamente Benjamín fue estrangulado y también para establecer si sufrió otro tipo de agresiones.