Uno de los damnificados, el ingeniero agrónomo Julián Soriano indicó que “nosotros compramos el terreno para hacernos la casa en 2014. Vivimos en la última manzana de la zona urbana de Intendente Alvear que es lindante con la Ruta 1” y “por ser zona urbana, existe una ordenanza donde se prohíbe la instalación de agroquímicos”. Por su parte, Melina Severino sostuvo que “la persona que compró los terrenos lo hizo hace un año y medio y empezó a construir sin habilitaciones. Lo curioso es que va a construir un galpón para alojar agroquímicos y dos tanques aéreos de gasoil. Nosotros estamos a 50 metros de todo esto, el galpón de agroquímicos está a tan solo 250 metros del barrio”.
Foto: El Norte en Movimiento