Tenía 88 años. Dejó su impronta en varias instituciones piquenses, como CICAR y CORPICO, donde fue parte de su directorio.
Además fue siempre un ferviente defensor de los comercios piquenses. Llevó adelante junto a sus hijos la empresa familiar PICOMAR que aún perdura en el tiempo y que se mantiene en vigencia.
Trabajó en varias instituciones intermedias y siempre fue un referente y motivo de consulta en el ámbito empresarial. Ha fallecido un hombre de trabajo, honesto y un apasionado defensor de la historia piquense.
En el año 2015, este medio había realizado una nota con Ricardo Giorgetto debido a los 50 años que cumplía en aquel momento CICAR y que el mismo se encargó “de recordar” con nostalgia y dolor porque había pasado desapercibido.