En el gimnasio del club Sarmiento, de Santa Rosa, se desarrolló un torneo de levantamiento de potencia, clasificatorio para el nacional del mes de Julio. La oportunidad fue aprovechada para despedir a Leticia Bertotto de las competencias de powerlifting.
Ella, múltiple campeona, lo reflejó de esta manera: “Fue muy emotivo; me llega hasta la médula. Yo quería sorprender a mi equipo y darle un regalo de las últimas tiradas y ellos me han sorprendido a mí. Han doblado la apuesta y me han entregado estos regalos y esta demostración de amor. Estoy realmente feliz. Hoy navego en el universo de la felicidad”.
Claramente, Leticia cierra una etapa y se abre otra. “Sigo como entrenadora, tenemos viajes estipulados incluso al exterior. Sigo siendo coach de Mariela Ortellado, una atleta de Elite que sigue yendo a los mundiales. Continúo conectada al levantamiento pero como transmisora de la actividad”.
Finalmente, Leticia dejó este mensaje para los deportistas: “el mensaje es músculo, inteligencia y amor. No se puede solamente entrenar el músculo, hay que ser inteligente, tener estrategia y objetivos; hay que ser resistente a la frustración y tener un equipo que te apoye fundamentado en la amistad y en el amor”, concluyó.
Una deportista reconocida a nivel mundial y ovacionada por el mundo. Con sus 47 años logró ser campeona mundial 5 años consecutivos, en un deporte que hace unos años era solo para hombres, dejó bien en claro que “el imposible no existe”.
Es la fundadora de “A.PA.LE.M” la asociación Pampeana de Levantamiento y musculación, creada para el crecimiento del deporte, pero su razón más importante y central es la ayuda social a través del deporte. Leticia Bertotto se retira con todos los honores, con el amor y orgullo de cada Pampeano y de cada deportista.
