El Banco Mundial recomendó cambiar la fórmula de movilidad que actualiza la AUH y asignaciones familiares, desde la actual, que tiene un rezago de nueve meses respecto de la inflación, a una que tenga un rezago de cinco. Según argumenta, esto reduciría la pérdida de poder adquisitivo para los beneficiarios, y por lo tanto en la pobreza, y el impacto fiscal de los bonos extraordinarios.