Se trata de dos menores de edad que fueron sorprendidos por el dueño de los camiones que estaban estacionados en calle 403 entre 430 y 432. El propietario de los rodados, cuando se percató de lo que sucedía, los salió corriendo y logró atraparlos a las pocas cuadras.
Inmediatamente convocó a la policía la que llegó en contados minutos y logró demorar a los dos malhechores y trasladarlos a la sede policial correspondiente. Ambos jóvenes se movilizaban en una bicicleta la que fue secuestrada por la policía.