A su vez le unificó esa sanción con otra anterior y le impuso una pena unificada de seis meses de cumplimiento efectivo bajo la modalidad de prisión nocturna.
El juez de control de Santa Rosa, Néstor Daniel Ralli, condenó a Marisa Ester Olguín a seis meses de prisión de cumplimiento efectivo, por resultar autora material y penalmente responsable del delito de defraudación mediante el uso de tarjeta de débito sustraída.
La resolución del conflicto llegó por la vía alternativa del juicio abreviado, que fue propuesto en forma conjunta por el fiscal general Guillermo Sancho, la defensora oficial Paula Arrigone y la propia imputada, una ama de casa de 28 años. El damnificado, al ser comunicado del acuerdo por el Ministerio Público Fiscal, también dio su consentimiento.
¿Cuál fue el hecho delictivo?
Con las pruebas reunidas en el expediente quedó probado que el 21 de marzo pasado, a la noche, Olguín fue con su pareja a un comercio céntrico de Santa Rosa y “adquirió un parlante marca Kazz y un micrófono, abonando con una tarjeta alimentaria con la cinta magnética rota” a nombre de otra persona.
“El ardid consistió en simular el pago mediante la utilización de una tarjeta social de Banco de La Pampa que tenía dañada la banda magnética, circunstancia que Olguín puso como excusa para conseguir que la operación se realizara mediante sistema Posnet, pero a través de la modalidad off-line (sin verificación instantánea)”, indicó el fallo.
Como la tarjeta pertenecía a otra mujer, “Olguín actuó simulando su identidad y firmando falsamente con el nombre de la titular, todo lo cual indica que actuó con intención defraudatoria a sabiendas de que con posterioridad el comerciante se vería imposibilitado de cobrar efectivamente los importes de las operaciones realizadas, generando de ese modo un perjuicio económico al damnificado”, expresó el juez.
“Más allá del reconocimiento realizado por la imputada, al suscribir el acuerdo de juicio abreviado, considero que los hechos se encuentran debidamente acreditados toda vez que de la denuncia radicada, el hallazgo de los elementos en cuestión con motivo de los allanamientos realizados, y el posterior reconocimiento de los mismos por parte del damnificado, surgen las circunstancias de modo, tiempo y lugar, en que acaecieron los mismos”, señaló Ralli.
Los seis meses de cumplimiento efectivo se unificaron con una sentencia anterior, dictada por el juez de control, Carlos Matías Chapalcaz, en otro abreviado, el 27 de febrero de este año. En esa ocasión la imputada recibió seis meses de prisión en suspenso por el delito de defraudación mediante el uso de tarjeta de débito sustraída en nueve oportunidades.