“Todas las alcaidías o unidades penitenciarias del país deberían tener inhibidores de señales de telefonía celulares”

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29 Enero, 2018 a las 22:03 hs.

Fernando Gauna Rubio aseguró que es un sistema económico y altamente efectivo para evitar que se cometan delitos desde la cárcel.



Mediante un comunicado, el referente del MOFEPA en la zona norte y especialista en temáticas de seguridad, Fernando Gauna Rubio, se habló sobre el caso Janssen y el uso de las comunicaciones por parte de los detenidos dentro de las cárceles.

 

“En primer lugar el director de la Unidad del Servicio Penitenciario Neuquino debe ser relevado del cargo y sumariado, sea por esta situación anómala ya que los detenidos no deben tener uso de su ocio al servicio de las redes sociales o por la ‘Culpa in Vigilando’ que le pudiera corresponder”.

 

“Es importante mencionar que los presos por día le cuestan muy caros a la sociedad (entre $ 25.000 a $ 35.000), sin contar la amortización de edificios y gastos de sistema penitenciario que ascendería a unos $ 100.000 para que, lejos de cumplir con una condena por sus delitos, la condena sea para las víctimas o familiares por éstas situaciones”.

 

“Todas las unidades y/o alcaidías penitenciarias del país deberían tener inhibidores de señales de telefonía celulares, ya que desde esos lugares, no solo se realizan delitos de secuestros virtuales, sino lo peor se siguen manejando desde adentro de las unidades como si estuvieran en total libertad con sus propios secuaces”.

 

“Cuando la familia Viale Ampudia; junto a otra familia víctima y la sociedad no solo de General Pico, sino que toda La Pampa, sufrió por esta terrible y repudiable conducta del asesino y atroz violador de Janssen, (sin descuidar la catarata de necedades e inutilidades judiciales), estuvimos en boca de todo el país por estas cuestiones, y hoy se repite el escenario”.

“Las personas que se hallan cumpliendo condena por este tipo de delitos como los que cometió Janssen, deben estar privados de todo tipo de uso de aparatología que les permita seguir pergeñando para su salida o aún a través de las redes sociales delitos similares a los que cometió; ya que lejos de ser un mecanismo coercitivo del estado en reproche por las atrocidades que cometió, parece ser un beneficio para este tipo de delincuentes”.

“Lo que resulta triste para nosotros los pampeanos es que el país se entera de nosotros por las atrocidades o por lo que no hay que hacer y no así por tantas cosas buenas que tanta gente hace; por ejemplo cuando desde General Pico yo he solicitado incansablemente la formación de un sistema penitenciario que trate los delitos por género penal; con cultura del trabajo en serio y no cultura del ocio, hasta con derecho laboral penitenciario que es único, (no ésta pantomima de que trabajan por ejemplo en las panaderías y encima luego intentan hacer juicios a las penitenciarías, por no estar regulado y en realidad ni 35 horas semanales quieren cumplir), con tratamiento intra muro de adicciones, enfermedades mentales y tratamiento para este tipo de delincuente; también presenté y solicité la inhibición de señales en las unidades, (aunque sea en las alcaidías provinciales), ya que las cárceles son Federales; en una propuesta única en el País e irrepetible, máxime elaborada por Pampeanos de los que el País debería hablar por innovadores y no porque tenemos lacras como estas”.

 

“Hace unos 3 o 4 años volví a retomar el tema al enterarme, no solo como integrante del Consejo de Seguridad Municipal, sino como conocido y conciudadano del ex jefe de la Alcaidía de Santa Rosa, el comisario general Fabio “Toti” Girabel; que también había iniciado un expediente solicitando la inhibición de señales en las Alcaidía, expediente único en el país, donde se probó, no solo la eficacia, sino también la no afectación de otras áreas aledañas a esa unidad a un bajísimo costo, sin descuidar que toda comunicación debe pasar por el conmutador y quedar registrada. Obviamente lejos de aprobar una innovación para nuestra provincia seguimos como en todo el país”.

 

“Sólo se hace falta voluntad política, tanto provincial como nacionalmente, para dar eficacia al poderoso Poder Punitivo del Estado y realmente lograr reinserción social de los reos, que esto sí que es responsabilidad del Estado, y yo he puesto no solo las herramientas, sino también los equipos que son altamente calificados al servicio de una solución concreta y fáctica, con garantías de que un altísimo porcentaje no reincidiría y mientras cumple la condena se siente una persona útil para la familia, Estado y lo más importante para sí mismo”.