El joven que se accidentó mientras corría una picada sigue mejorando y por ello ahora se encuentra en una sala común.
Fabricio Medina, el motociclista que sufrió una grave accidente días atrás en la Avenida Isidoro Brunengo cuando corría una picada, sigue con su evolución favorable, por lo que fue pasado de la Unidad de Terapia Intensiva a sala común del Servicio de Clínica Quirúrgica. Se encuentre hemodinámicamente estable, a la espera de mayores progresos para luego ser sometido a una intervención terapéutica médica traumatológica.
Por otro lado, el muchacho de apellido Quiñones, que volcó también días atrás en el camino de acceso a la Laguna “La Arocena”, sigue internado en la Terapia Intensiva de la Neoclínica de Río Cuarto, con respirador artificial y estado reservado. De todas formas, la fuente consultada indicó que evoluciona de forma paulatina.