La artista recientemente cumplió 57 años. En una íntima charla, nos contó sobre su infancia, su familia y su intenso vínculo con la música.
Alicia Robledo nació un 17 de enero de 1961 en General Pico, hija de Domingo Robledo y Elba Deodina Frías. Tuvo un solo hermano, Carlos Daniel, a quien perdió lamentablemente en un accidente, pero que le dejó hermosos sobrinos.
Alicia recuerda de su infancia que “primer grado lo hice en la Escuela Nuestra Señora de Luján, donde mi primera maestra fue la amorosa señorita Haide Misula. Vivíamos en calle 31 casi 12, al mudarnos al barrio San Etelvino asistí a la Escuela Nº 111 de segundo a quinto grado, luego vivimos en barrio El Molino y termine la primaria en la Escuela Nº 12, donde conocí a quien años más tarde sería mi esposo. El que mi padre cambiara de domicilio a menudo hizo que conociera a mucha gente e hiciera muchos amigos, con muchos me relaciono actualmente”.
“Mi vínculo con la música fue desde que tengo uso de razón ya que mi papá toca el acordeón y mis tíos eran también músicos. Recuerdo de las reuniones con vecinos en patios de tierra se armaban tremendos bailes, yo tenía 5 años, me subía en una silla y cantaba imaginando que tenía público, luego llevada de la mano de mi abuela paterna comencé a cantar en la iglesia evangélica, donde aprendí amar a Dios y vivir bajo sus preceptos con los que rijo mi vida hasta hoy”, contó.
“El 5 de Enero de 1979 nos casamos con Raúl Álvarez después de 2 años de novio, con solo 17 años los dos, formamos una linda familia de siete hijos, nuestro primer regalo navideño llego el 24 de diciembre de 1979 y se llama Mariano (38). Luego llegaron los demás: Linda Natalia (36), Mariela Gisel (35), Milton (32), Jonathan (28), Leonardo (26) y Maximiliano (21). Los cinco varones son músicos, Mariano y Milton lo hacen de manera profesional ya hace varios años”, remarcó.
Con felicidad Alicia agregó que “en la actualidad tenemos 8 nietos. Mi esposo fue el que comenzó con la idea de hacer música fuera de la iglesia, como decimos comúnmente los cristianos ‘música secular’, no quise saber nada, así fue que el comenzó con Beracca, donde estuvo 4 años, luego decidió dejar el grupo y me propuso formar algo juntos, me costó bastante pero entendí que se puede cantar canciones que tengan un buen mensaje de ese modo también llevar un poco de alegría a tanta gente que nos escucha”.
“La primera vez que subí a un escenario fue en el querido Viejo Galpón, gracias a la generosidad de Las Voces Del Molino y la intervención de José Luis Cisnero, amigos a quienes respetamos y queremos mucho. Mi primera peña como solista fue en Metileo, donde conocí al ‘Turco’ Diván un 18 de marzo de 2003, desde ese entonces recorrimos localidades de nuestra provincia, también fuimos al festival de La Carreta en General Alvear (Mendoza), a San Martin De Los Andes, a Cavihaue (Neuquén), Ciudad Parque (Córdoba), en alguna peña callejera de Cosquín, en Parque Patricios (Buenos Aires) con Jorge Gordillo y he participado varias veces de fiestas importantes de nuestra hermosa ciudad, que siempre es una gran satisfacción cantarle a nuestra gente”, expresó
Afirmó que “cantar folclore me ha dado muchas alegrías, emociones y la oportunidad de conocer personas y entablar una hermosa amistad. He tenido el placer de compartir escenario con gente del folclore como Los Altamiranos, quienes auspiciaran de padrinos en un evento en General Acha organizado por el Horacio Gigena; en los 100 años de Sansinena con Lele Lobato, Natalia Pastoruti, en otra ocasión con Argentino Luna y más”.
“Mis mejores recuerdos los guardo cuando tuve el honor de subir al escenario con la recordada Tamarita Castro unos meses antes de su desaparición. También recuerdo con emoción cuando Ángela Irene se hizo presente en mi peña y cantamos juntas, con ella mantenemos una hermosa relación de amistad es, aparte de una gran cantante, una persona excepcional”, sostuvo.
“La última fue una gran noche festejando junto a Juan Ramón García aniversario de la radio que los chicos de Destino San Javier me invitaran a cantar una zamba, inolvidable el momento. Tampoco podre olvidar el día que participamos del cumple de Hailen Ricca, fue muy emotivo. Hoy seguimos recibiendo lindas propuestas como la de hoy, donde estaremos en la fiesta de Monte Nievas, y el mañana que viajamos a Mones Cazón, a un festival junto a Daniel Luna, Jony Álvarez, Marta Coiro, Ramón Carreras y Raúl Álvarez. También estoy participando de un concurso de Dones y Talentos en Santa Rosa”, comentó.
Por último, Robledo agradeció “a Dios por darme la posibilidad de vivir tan lindas experiencias, a mi familia que son mi sostén, a mis amigos que siempre están en las buenas y en las malas, a los músicos amigos que me han acompañado”. En tal sentido nombró a “Jorge Álvarez, Diego Avalos, Julio Ortiz, Ramón Carreras, Pablo Campanelli, Gabriel Sequeira (mi primer percusionista), José Luis Cisneros, Fernando Vera, Miguel Cuello, Ramiro Cuello, Mariano Romero, perdón si me olvido de alguno. A mis hijos Mariano, Milton, Jony, Leonardo y Maxi, que siempre están presentes cuando organizo algo. Al profe Andrés Sosa, por su paciencia. Agradezco especialmente a mi esposo Raúl por ser el compañero ideal, mi maestro, mi músico, el que me consuela y anima, nada sería igual sin él. Gracias a los amigos bailarines por acompañarnos siempre”.
