El cuerpo fue encontrado el domingo en horas de la mañana en el interior de su camioneta, a la vera de la ruta 55, a unos tres kilómetros del límite con La Pampa y a unos 300 metros de la entrada al campo donde trabajaba.
En la actualidad hay dos detenidos: Ramos, oriundo de Santa Isabel – La Pampa-; y Romero, de Anchorena – San Luis-. Ambos, trabajaban de jornaleros y estaban a cargo de Etchart, oriundo de Victorica, radicado en Arizona. Una discusión por el desempeño laboral de Ramos y Romero, habría provocado una discusión en el patio de la casa donde vivían los empleados, desencadenado el fatal desenlace.
Cuando la División de Homicidios de San Luis llegó al lugar, lo hizo acompañada de profesional para recabar la mayor cantidad de pruebas y esclarecer el crimen. Además del trabajo de relevamiento de muestras de ADN y huellas digitales, estaban los perros de la División Canes de Arizona, San Luis.
Según fuentes consultadas por InfoHuella, los primeros pasos que dio uno de los perros luego de estar en la camioneta donde aún seguía el cuerpo de la víctima, fueron decisivas.
El perro no caminó sobre la cinta asfáltica los 300 metros ante la entrada del campo Villa Luján donde trabajaba Etchart, sino que se insertó directamente al predio rural cruzando el alambrado, como cortando camino por pleno monte. El trayecto, era con dirección al casco de la estancia, donde también estaba la casa donde vivían los dos empleados que ahora están detenidos. Allí, se secuestró una bolsa similar a la que envolvía el cuerpo de Etchart. También, se encontró prendas manchadas con sangre y un tramo de la soga con la que maniataron el cuerpo de la víctima.
El perro hizo unos metros desde la camioneta hasta el monte, y luego le costó seguir el rastro.
Ese detalle, dejó como resultado una fuerte hipótesis: uno de los empleados trajo la camioneta desde el casco de la estancia hasta la ruta, con el cuerpo de Etchart ya sin vida. El otros, se fue a caballo. Cuando dejan la camioneta en la banquina, el peón que conducía la Ranger gris ingresó al monte, se subió al caballo y regresaron al casco.
En silencio
Mientras la investigación arroja pruebas contundentes, Ramos, de 33 años y Romero, de 22, optaron por guardar silencio ante el juez de Instrucción Penal 2, Leandro Estrada. Ambos, están imputados por el asesinato de su patrón, César Crispín Etchart.
Animales
Según pudo saber InfoHuella de fuentes ligadas a la investigación, Etchart habría ordenado a Ramos y Romero, juntar una cantidad importante de toros ante la visita de unos compradores al campo. Cuando los peones llegaron del monte con los toros, la cantidad no era la ordenada y, ante ello, Etchart los habría insultado y humillado ante los compradores. Luego de unas horas, cuando quedaron los tres solos, en el patio donde vivían los jornaleros, uno de los empleados le propinó una trompada a Etchart. Luego, ambos habrían continuado con la agresión en el rostro y la cabeza con varillas de curupay, ocasionándole la muerte. Seguidamente, habrían llevado el cuerpo sin vida y maniatado en la camioneta hasta la ruta, para simular un secuestro.