Lo afirmó el viceministro de Ambiente de Nación, que visitó hoy el predio ubicado en las afueras de la ciudad norteña. “Es un tema preocupante”, afirmó.
El viceministro de Ambiente de la Nación, Lucas Figueras, realizó en la tarde de este jueves una visita en el predio del basurero de General Pico, con la intención de evaluar la situación y analizar posibles soluciones a la problemática ambiental que genera su saturación. Consideró que es “una situación preocupante” lo que pasa en la ciudad, opinó que existe “desidía” de parte el Municipio y adelantó que se requerirá una inversión de 80 millones de pesos para hacer obras y cumplir con los estándares mínimos.
La llegada del funcionario nacional se dio por gestión del disputado nacional Martín Maquieyra, quien lo acompañó en la recorrida junto al concejal Jorge Audisio.
“La idea es hacer una suerte de relevamiento, nosotros teníamos algunos relevamientos hechos de la provincia pero es casi imposible tener la actualización de esos relevamientos, porque este tipo de rellenos y vertederos crecen a un ritmo muy acelerado. Nos acercamos para ver de qué forma podemos tratar de colaborar con la gente de Pico y de La Pampa en general, porque parece una metodología repetitiva de mal manejo de los recursos, la verdad que muestra mucha desidía el sistema operativo que se usa para el control de este relleno, la verdad que es preocupante esta situación”, afirmó Figueras en una entrevista que brindó a infopico.com.
¿Qué medidas se deben tomar ante esta situación?
“Como primera medida hay que hacer un proyecto serio de acuerdo a la problemática y al volumen de residuos, para que a futuro Pico junto con Santa Rosa tengan un relleno controlado con los estándares de calidad apropiados.
Esto no es una excepción a nivel país, es como muchos otros que están funcionando de esta manera. Son vertederos que colapsaron, se desbordaron y el impacto ambiental que producen hoy es muy alto. La inteligencia está en parar con este sistema, tratar de ir generando una mejoría y planificar algo sustentable a futuro. De seguir así, crece la densidad poblacional, va a crecer la cantidad de residuos y el problema va a ser cada vez más grande”.
¿Cómo intervine Nación en esto, con fondos?
“Como primera medida tiene que quedar en claro que la competencia de este tema es netamente municipal y, en el caso de subsidios, por una cuestión constitucional provincial, es de la provincia de La Pampa. Nosotros lo que hacemos, en la medida que exista la voluntad de colaboración reciproca y asistencia, le damos en una primera etapa asistencia técnica para generar el Plan Provincial, en su caso, o el Plan Municipal de Gestión de Residuos GIRSU (Gestión Integral de Resididos Sólidos Urbanos), para que hagan la planificación futura, lo que va a determinar la inversión depende de la cantidad de habitantes. En Pico sería inversión de unos 80 millones de pesos para poder hacer el reservorio donde después se depositen los residuos pero con una operación adecuada, con piletas de lixiviados, una cava que se encuentre impermeabilizada, ese es el estándar mínimo que tendríamos que tratar aspirar en este caso.
Nosotros estamos haciendo hoy algunas asistencias en Jujuy, Catamarca, estamos empezando si Dios quiere la obra de Formosa, seguimos con Paraná y Calafate. Estamos dando determinadas asistencias que fueron proyectos que se venían dando y que nosotros los continuamos. En este caso tendríamos que empezar de cero, porque no tienen ni siquiera los proyectos ejecutivos presentados históricamente, la verdad que es preocupante”.
¿Les llamó la atención algo de lo que vieron en el basurero de Pico?
“Como trabajo de esto hay pocas cosas que me llaman la atención, lo que es llamativo como primera medida es que nos se tomen cartas en el asunto, esto no es continuar y continuar y vemos que pasa, esto es hacer un esquema transitorio para lograr un punto de mejora de menor a mayor. Lo que llama la atención es que no paren de hacerlo, que no frenen y digan ‘muchachos esto esta rebalsado, sabemos que la macana está hecha, empecemos a hacer algo en serio’. Por eso la convocatoria que nos hace Martin a venir a la ciudad, para ver entre todos como le buscamos la salida, en algún momento alguien se tiene que hacer responsable, hacer los estudios y los proyectos, los quehaceres y los actos preparatorios para que, a posteriori, llegue la inversión.
Nosotros lo que hacemos es la asistencia, nos ponemos del lado de la necesidad tratando de colaborar con el intendente o con el gobernador, queremos ponernos a disposición. Como segunda mediada, según cada caso particular, analizamos como incide el volumen del vertedero, la cantidad habitantes que tiene la ciudad, la distancia que queda, el tipo de recorrido y tipo de recolección, si es municipal o no, si es compactado o no, profundidad de napas freáticas, hay un montón de variables que hacen que cada proyecto sea un proyecto muy particularizado. Hay moldes generales, pero hay que ir a un esquema donde se hagan un montón de estudios, incluso sociales de acuerdo a las cooperativas que trabajan en el reciclado, tipo de instrucción, seguridad, etc”.
¿Entonces el financiamiento de donde vendría?
“Nosotros los proyectos que estamos encarando lo estamos haciendo a través de financiación del Banco Interamericano de Desarrollo, los más grandes, donde hacemos un proyecto integral, basado en la integralidad operativa, de recursos humanos, de los sistemas consorciales hasta 50 kilómetros. La idea es comunicar y aunar en un consorcio de más de un municipio, porque el esfuerzo para uno y para diez es lo mismo”.
