Los puedes encontrar en su habitual lugar de ensayo, donde varias veces por semana se reúnen a compartir una pasión que solo los que aman la música entienden…y si andas por algún lugar de General Pico, no es extraño que entres a un café, mas en estos días de frío, y veas una grata reunión de gente vocalizando, entonando, sonriendo en cada acorde, con la seriedad que marca el momento, pero la soltura y la sonrisa que también lleva el compartir con amigos…
Anoche andaban ensayando por Olar, no estaba Enrique, que debe estar preparando algo para los 47 años del lugar, pero, cuando apareció “Mochila” Ribeiro con la guitarra y un parlante, seguido del resto que de a poco se iban sumando, se armó la mesa larga, donde algunos cafés sirvieron para paliar la tarde/noche fresca, calentar la garganta y arrancar con los ensayos.
Una linda y agradable manera de cerrar un día de trabajo han encontrado los “muchachos” del Coro Polifónico ciudad de General Pico, en distintos lugares de la ciudad, compartiendo lo suyo, lo que les gusta, con quien esté en ese momento…
Bienvenido ese pedacito de cultura, parte de todos, mucho de ellos…
