Se lo asocia a las altas temperaturas que se sucedieron los últimos días de febrero.
Luego de que aparecieran aproximadamente 500 pejerreyes muertos, tras el fin de semana largo, en la costa de la laguna ‘La Arocena’ de la Reserva Natural Urbana ‘Benicio Delfín Pérez’, la Dirección de Espacios Públicos resolvió enviar a la UNLPam y al laboratorio de Corpico muestras de agua para determinar las causas.
Personal de mencionada dirección, perteneciente a la Secretaría de Planificación y Gestión Urbana del municipio, dio aviso el miércoles 1° de marzo de que en las orillas del espejo de agua aparecieron peces muertos. A partir de allí, se enviaron muestras de ejemplares muertos y agua de la laguna al laboratorio de la cátedra de Manejo de Recursos Bioacuáticos de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UNLPam, a fines de evaluar la situación, y también a laboratorios de Corpico y de la Facultad de Ciencias Veterinarias para realizar otros estudios microbiológicos.
De manera preliminar, estos estudios, que continúan, no arrojaron ningún resultado que genere riesgo para la salud humana. Según consideraciones, el fenómeno está asociado a las altas temperaturas que se sucedieron los últimos días de febrero, que elevaron notoriamente la temperatura del espejo de agua, y a la baja concentración de oxígeno disuelto en el agua.
Es de destacar la rápida respuesta en la colaboración de los diferentes organismos consultados, en especial de la Dirección de Recursos Naturales de la provincia que a través de uno de sus técnicos en General Pico colaboró en mediciones y toma de muestras.