El concejal Angelucci (PJ) se refirió a las sanciones para quienes consuman alcohol en la vía pública o vendan fuera de horario.
“Fue un proyecto que presentó el Ejecutivo, porque estaba la ordenanza pero nunca se había reglamentado y ahora para reglamentarla necesitaba las sanciones y eso fue lo que se aprobó”, explicó José Luis Angelucci a infopico.com.
“No se puede consumir alcohol en la vida pública”, eso lo prohibía tanto la ordenanza original como la modificada. La diferencia es que ahora “si encuentran a alguien consumiendo cerveza en la vía pública, se le va a incautar la bebida, se le va a hacer un acta de infracción y tendrá que pasar por el Juzgado de Faltas a pagarla”. Antes solo se decomisaba la bebida y se instaba al consumidor a no repetir la falta.
Agregó el edil que la prohibición también “corre para las venta y el sistema de delibery. Fuera de los horarios -23 horas- no puede haber distribución de vidas alcohólicas”.
El patrullaje policial y el alerta de vecinos permiten establecer si hay personas consumiendo alcohol en la vía pública, así como las recorridas de los inspectores municipales permiten detectar venta de estas bebidas fuera del horario permitido.
Consultado sobre la manera en la que piensan controlar la distribución en la modalidad delibery, Angelucci adelantó que se harán controles y “cuando salga la moto se la va a parar para ver si lleva alcohol o no. Eso va a depender creo yo mucho de la Policía de la provincia, más que de los inspectores municipales, está armado así”.
Valoró luego el rol de los efectivos policiales ya que “el año pasado la Policía actuó y generó infracciones, pero las multas no estaban reglamentadas así que quedó en la nada, ahora si se va reglamentar”. Especuló con que en un plazo máximo de un mes las modificaciones a la ordenanza 110/01 deberán estar vigentes.
Un reclamo de muchos comerciantes era una supuesta situación de “injusticia”, dado que los negocios como quioscos o despensas no pueden vender bebidas alcohólicas más allá de las 23 horas, pero si pueden hacerlo los bares, pubs y boliches.
“Muchos quioscos viven de la venta de alcohol, eso le genera una ingresos importantes, pero es totalmente distinta la cosa, vos te sentas en una confitería o un bar y te sirven en una mesa, en un vaso, es diferente. Imagínate que un quisco puede estar abierto las 24 horas del día y un pub abre solo unas horas y esta además preparado para ese tipo de cosas”, dijo el edil, poniendo el foco sobre el control que se puede hacer sobre la persona que bebe en los lugares habilitados, algo que no es posible en quien compra la bebida y se retira a consumirla en otro lado.
Contó luego una experiencia que vivió días atrás cuando “estaba sentado en una mesa de un bar bien pegada a la calle, pasó un auto con dos chicos que pararon, bajaron el vidrio y sacaron dos botellas de cerveza tratando que la moza les vendiera. La chica les dijo que no podía vender bebidas alcohólicas para llevar y les dijo que si querían tomar algo tenían que bajarse e ingresar al lugar”.
“¿Qué pasa si un tipo se sienta en el vereda de un bar y se pone a tomar una cerveza?, pasa la Policía, le tiene que incautar la bebida y hacer la multa, porque el expendio es diferente, está autorizado ese local para poder vender bebidas alcohólicas hasta un cierto tiempo”, comentó.